Asesoría Julia Z. Camerieri Psicóloga y Administracion. Mount St. Mary University, MD.
La señora Angela
Agripina Torres Asurza de Fernández Dávila (Huaylas, Perú) creó este método en
las escuelas de niñas Nº 324 y de niños 339.
El Ministerio de Educación la nombró asesora y para esta grabación que contó
con la participación de la soprano Margarita Ludeña Guerrero, con el piano de
José Mazzini Armas. Ludeña (Piura), fundadora del Coro del Estado.
El método está dirigido
a Transición (I Grado). El disco venía con
un libro con las letras de los himnos e instrucciones. Posteriormente, la misma
autora escribió algunos dramas y estudios sobre el desarrollo del lenguaje en
el niño.
El método consta de 50
temas, en dos LPs. El primero con cuatro cantos de introducción y 21 cantos
educativos y el segundo con 25. Aparte de los LPs, también se distribuyó a
través de una caja con dos cassettes, con dos formatos, el primero con el
título de "Método Musical para lenguaje" y el otro con el título
"Método Musical para el lenguaje del niño", ambos con dos niveles
diferentes.
El disco tiene cuatro
cantos de introducción: El saludo, La tarea, Mi lápiz y Despedida, y
posteriormente los cantos "La A", "Tus manos", "Mi
Dios", todos del primer LP.
Pues estos discos
recobran actualidad. El profesor de aula y el médico son dos profesiones
estrechamente ligadas a la Educación. Las pandemias que hoy nos azotan nos inducen a revisar la Escuela fuera del
hogar.
Este no es el lugar más adecuado para la formación de
la niñez. Para corroborar este enunciado, recordamos el método titulado ALPAMAYO,
que creó la profesora Ángela Torres de
Fernández Dávila, en los años cincuenta, y que en 2021 recobra plena vigencia y
mayor importancia.
Junto al Método
Musical, sumamos hoy experiencias en diferentes países de Latinoamérica que
reemplazan la escuela convencional por internet. Se conocen que la tecnología
de hoy no arroja buenos resultados, sino, al contrario, genera temor en el niño
y en la familia.
Educación ante el
Covid-19 en América Latina: Retos y alternativas de política, es un valioso
documento que nos ofrece el BID a través de varios estudios y comentarios.
Gregory Elacqua - Norbert Schady explican que
Latinoamérica y el Caribe, con excepción de Nicaragua, las escuelas cerraron a
mediados de marzo y, hasta la fecha, siguen cerradas por la crisis de Covid-19.
¿Qué efectos tendrá esto sobre la educación?
El equipo convocado por
el BID advierte que si no se implementan
políticas para extender el calendario escolar, los niños y jóvenes de la región
perderán entre 3-6 meses de educación presencial.
Los cierres escolares
que se están dando por el Covid-19 son sustancialmente más largos que los que
en general se observaron en el pasado. Esto podría precipitar el abandono
escolar, en particular entre jóvenes en familias de ingresos bajos o medios.
No existen estudios
confiables para la región que permitan estimar la efectividad del aprendizaje a
distancia comparado al aprendizaje presencial. Sólo Uruguay cuenta con
plataformas digitales que cubren el currículo escolar y permite que los
docentes monitoreen los aprendizajes de los estudiantes.
Además, la educación a
distancia aumentará la desigualdad en el aprendizaje porque los hogares de
mejor condición socioeconómica tienen una mayor probabilidad de tener acceso a
internet de calidad, así como a otros insumos necesarios para que la educación
a distancia funcione bien.
En general, y en
particular en comunidades pobres, los maestros ejercen labores que van más allá
de sus funciones estrictamente educativas. Los maestros ayudan a identificar
niños con problemas de salud, nutrición o abuso, y alertar a las autoridades
correspondientes. Diferentes fuentes indican que la pandemia ha llevado a
aumentos en la violencia intrafamiliar. En este contexto, los cierres de las
escuelas son particularmente preocupantes.
En Lima, por ejemplo,
esta cifra asciende a más de la mitad de la matrícula y en otras ciudades,
tales como Bogotá, Buenos Aires, y Quito, a más de un tercio.
La magnitud de la matrícula
privada plantea serios retos en el contexto de la pandemia. Las escuelas
privadas dependen de pagos por padres de familia, y muchas han suspendido los
pagos a maestros o están quebrando.
El sector privado
también representa una proporción importante, y creciente, de la educación
superior en la región—más de dos terceras partes de la matrícula total en
universidades, institutos técnicos, y educación vocacional en Brasil, Chile,
Costa Rica y Perú, entre otros países.
Muchas instituciones
privadas de educación superior podrían quebrar durante la crisis. A diferencia
de las escuelas privadas, sin embargo, sus alumnos no tienen un derecho automático
de transferirse al sector público.
Las consecuencias para
el sistema de educación postsecundaria son menores, pero son mayores para los
individuos en instituciones que quiebran que se encontrarían sin título, sin
manera de convalidar las asignaturas que ya tomaron, y en algunos casos con una
sustancial deuda.
Los aspectos
de infraestructura y saneamiento relacionados al distanciamiento
social, limpieza, resguardo de salud dentro de las escuelas y acceso a agua
potable y lavamanos serán desarrollados con mayor detalle en otro documento.
En resumen, la pandemia
tiene serias implicaciones para la educación en la región, incluyendo posibles
aumentos en la deserción, menores niveles de aprendizaje, una mayor desigualdad
en los resultados, y el quiebre de muchas instituciones privadas…
https://youtu.be/f-ehw6LZ_rQ?t=70.
PAPEL DE ARBOL
Creado en 1992 en Lima por July Balarezo y Jorge Zavaleta Balarezo
Desde 2017 se Edita en Emmitsburg, MD y Pittsburgh PaA
Editores Jorge Zavaleta Alegre y Julia Z. Camerieri.
Asociado a TIME NY DIARIO16 EL MERCURIO DIGITAL DE ESPAÑA