Papel de Arbol

miércoles, 11 de julio de 2018

¡LA AMAZONIA ES SOLO PARA EMPRESAS Y NO PARA COMUNIDADES!




Jorge Zavaleta Alegre
Una y otra vez, las investigaciones han demostrado que el reconocimiento de los derechos territoriales indígenas y comunitarios es una solución comprobada para la conservación de los bosques, la mitigación del cambio climático, la reducción de la pobreza y la catalización del desarrollo sostenible. 

Una nueva investigación del Instituto de Recursos Mundiales permite corroborar la existencia de un campo de juego desigual entre las comunidades y las empresas que luchan por los derechos a la tierra.

“Las comunidades sacrifican décadas navegando en complejos y costosos procesos gubernamentales que pueden obligarlos a renunciar al territorio y los derechos, mientras que las empresas pueden obtener rápidamente concesiones en la misma tierra”, explica el IRM, en una extensa publicación enviada a esta publicación.

"Las compañías expanden rápidamente las operaciones en África, Asia y América Latina, y poseen muchos recursos. Aunque más del 50 por ciento de la tierra del mundo se mantiene en forma colectiva, los grupos indígenas y las comunidades poseen legalmente solo el 10 por ciento de la tierra a nivel mundial", señala el IRM.

Esta paradoja se explica en el  tiempo y el costo  del proceso para formalizar los derechos a la tierra. En muchos casos el trámite  demora hasta 30 años o más.

En Filipinas, el proceso requiere 56 pasos legalmente obligatorios, y en Indonesia, 21 entidades gubernamentales diferentes están involucradas, pero las empresas normalmente pueden asegurar los derechos a largo plazo de la tierra en solo 30 días a cinco años.

The Scramble for Land Rights: Reducing Inequity between Communities and Companies, analiza las discrepancias en tiempo, dinero, tamaño de la tierra y derechos otorgados en 15 países.

Los Pueblos Indígenas y las comunidades a menudo se ven obligados a renunciar a áreas significativas de sus tierras consuetudinarias o perder derechos sobre recursos naturales valiosos como agua limpia o plantas medicinales, paralizando sus medios de vida.

"Los gobiernos deben estudiar detenidamente cómo sus políticas sobre derechos de propiedad favorecen a las empresas, especialmente las que talan bosques, queman turberas ricas en carbono o agotan los recursos naturales, sobre comunidades indígenas que han protegido los bosques del mundo por mucho tiempo", comenta Victoria Tauli-Corpuz , el Relator Especial de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.

"Este campo de juego injusto no solo plantea graves riesgos ambientales, sino que también amenaza los medios de subsistencia de más de 2.500 millones de personas que dependen de tierras colectivas".

El informe concluye que, en la mayoría de los países, las empresas pueden garantizar los derechos a la tierra sin examinar reclamaciones comunitarias existentes sobre la misma tierra, y que incluso cuando los gobiernos requieren consultas comunitarias, las empresas solo hacen gestos simbólicos en lugar de intentar sinceramente obtener, consentimiento previo e informado.

Según Global Forest Watch, el mundo perdió 15,8 millones de hectáreas de bosque tropical en 2017, pero la tasa de pérdida de cobertura arbórea fue menos de la mitad en comunidades y tierras indígenas en comparación con otros lugares.

WRI lanzó el informe en Lima, Perú en asociación con AsM Law Office, el Centro de Investigación Forestal Internacional (CIFOR), Rainforest Foundation United States (RFUS), Derechos y Recursos Initiative (RRI) y Ujamaa Community Resource Team que dirigió la investigación de campo en Indonesia, Perú y Tanzania.

Los expertos hablaron junto con funcionarios del gobierno y líderes indígenas que luchan por garantizar los derechos formales a la tierra en la Amazonía peruana.

En Perú, las empresas pueden encontrar fácilmente accesos directos en torno a requisitos onerosos, como comprar pequeñas parcelas de tierra y convertirlas en grandes concesiones agroindustriales para evitar las regulaciones ambientales y franjas claras del Amazonas.

Las comunidades indígenas no tienen esta opción, por lo que cuando surgen disputas por la tierra u otros obstáculos, los esfuerzos para titular su tierra se detienen.

Por ejemplo, en 2014, grandes secciones de los bosques ancestrales de la comunidad de Santa Clara de Uchunya comenzaron a desaparecer.

Sin el conocimiento o consentimiento de la comunidad, el gobierno regional había cedido los derechos a muchas pequeñas parcelas de sus tierras, que Plantaciones de Pucallpa, una compañía de aceite de palma con conocidos problemas ambientales y legales, compró.

"Para comunidades como la mía, nuestra tierra es nuestro sustento. En Ucayali, una compañía de aceite de palma nos ha excluido de la tierra que es nuestro hogar, talando el bosque y dejándonos sin otra opción que luchar en la corte ", dijo Carlos Hoyos Soria, líder de la comunidad de Santa Clara de Uchunya en Perú

"Al mismo tiempo, nuestra solicitud de título de propiedad de la tierra se ha estancado durante varios años, durante los cuales hemos recibido amenazas de muerte y ataques violentos contra nuestra comunidad. Tememos por nuestras vidas, pero sin nuestra tierra, perdemos todo ".

Tensiones como estas están escalando en muchos de los 15 países estudiados en The Scramble for Land Rights. 

Las disparidades entre las comunidades y las empresas generan hostilidad que puede convertirse rápidamente en un conflicto, especialmente en América Latina, donde cientos de defensores del medio ambiente han sido asesinados en la última década en medio de una escalada de violencia. Los conflictos van desde disputas fronterizas con vecinos a concesiones superpuestas, y pueden unir a las comunidades en burocracia burocrática durante años. 


 Para nivelar el campo de juego entre comunidades y empresas, la IRG llama a los países a hacer procedimientos más complejos y más claros, enmendar pasos que imponen cargas difíciles e indebidas a las comunidades y hacer cumplir uniformemente las políticas de adquisición de tierras corporativas. 

Y en todo el mundo, urge  una mejor resolución de conflictos Los cambios son necesarios para abordar reclamaciones de terceros en competencia e incrementar las consultas comunitarias que garantizan el consentimiento libre, previo e informado (CLPI). 
tierras.

*Papeldearbol@gmail.com
Editor Jorge Zavaleta Alegre
Corresponsal El Mercuriodigital.net  de España, Tandilnews de Argentina, Panoramica de Milan, Diario16 de Madrid
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Gardenias de la selva en jardines  de Trujillo

La lucha contra la corrupción en peligro, por Manuel Romero Caro



Jorge Zavaleta Alegre
 América Latina no logra salir de la zona roja del índice sobre percepción de corrupción. La organización alemana, Transparencia Internacional, reveló en su informe para el año 2017 que la corrupción en el sector público en los países latinoamericanos sigue muy alta a pesar de ciertos avances.

La organización resaltó que la creación de legislaciones fuertes, como en Chile, y la investigación a altos personajes de poder como en Ecuador y Perú, no son avances generalizados y “no constituyen políticas integrales que aborden las causas históricas y estructurales de la corrupción en la región”.

El  actual presidente del Perú, Martín Vizcarra, prometió  "tiempos mejores" luego de que el Congreso aceptara la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski (PPK), a quien la fiscalía pasó a calidad de investigado por el Caso Odebrecht.

"Seremos firmes en la lucha contra la corrupción. La transparencia será un pilar de nuestro mandato", prometió Martín Vizcarra. "Van a venir tiempos mejores", había dicho al ingresar a prestar juramento en el Congreso, donde fue recibido con aplausos, inclusive por la oposición liderada por Keiko Fujimori, hija del presidente Alberto Fujimori (1990-2000), quien huyó del país cargado  de fondos fiscales y al volver fue condenado a prisión e indultado fingiendo gravedad de su salud.

Ahora, 11 de julio, Vizcarra anuncia  que el Poder Ejecutivo conformará una comisión de personas notables para integrar un equipo que diseñe un proyecto de reforma del Poder Judicial,  a ser presentado el próximo 28 de julio al Congreso de la República, como parte de su Mensaje a la Nación.

Esta reacción.  es consecuencia de “los graves hechos conocidos en los últimos días y que involucran a magistrados del Poder Judicial y miembros del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), que revelan el “enorme grado de inmoralidad” con el que actúan quienes están llamados a administrar justicia”, según reza la versión oficial del jefe de Estado.

Enfatiza el gobernante que la existencia de “mecanismos, prácticas y vicios” que pervierten y contaminan la administración judicial, los cuales deben ser erradicados. Pide al Congreso aplicar artículo 157 de Constitución y remover miembros del CNM.

El gobierno acepta que todas las medidas dispuestas para solucionar este problema resultarán insuficientes si se mantienen las mismas redes y prácticas que corrompen y envilecen a la administración judicial. Enfatiza en que ninguna fuerza política, ningún miembro de la administración judicial y ningún peruano de buena voluntad podrían oponerse a una reforma de fondo del Estado y de la justicia.

Más allá de las palabras y los voces encendidas de algunos parlamentarios, que resaltan el trabajo periodístico del Instituto de Defensa Legal-IDL, dando cuenta de audios que vinculan el  turbio manejo de la justicia por parte  fiscales de la Corte Suprema de Justicia  y el  Consejo Nacional de la Magistratura, el país percibe la anomia de la maquinaria estatal para abordar con seriedad este flagelo  de la corrupción.

Por ello, lo que afirma el economista Manuel  Romero Caro,  fundador de Gestión, diario peruano, desde su columna  Atalaya Económica, los lectores advierten los peligros de que la corrupción siga latente, en tanto el los Poderes del Estado no emprendan serias reformas  desde las raíces, empezando por el Poder Judicial. La prensa libre ratifica la necesidad de reestructurar desde las  bases  esta administración  nacional:
La empresa Odebrecht y los gobiernos del Perú   muestran los más grande escándalos de corrupción en el último  cuarto de siglo.

“Cuatro son los objetivos de Odb : 1) Vender rápidamente sus proyectos. 2) Pagar lo menos posible por reparaciones. 3) Quedarse a trabajar aquí. 4) Que no los penalicen judicialmente”.

Las autoridades brasileñas han suspendido la cooperación judicial con sus pares peruanos ante el reclamo de los abogados de Odebrecht (Odb) sobre que se les persigue judicialmente a pesar de la colaboración que están brindando.

Como primera medida, suspendieron las declaraciones que iba a prestar el exdirector del Departamento de Operaciones Estructuradas (daba los sobornos) de Odb. Y correría igual suerte el nuevo interrogatorio a Jorge Barata y la entrega de una copia de los archivos encriptados de la Caja 2 de Odebrecht.

Y aunque el todavía fiscal de la Nación, Pablo Sánchez ha manifestado que “superarán el impasse” y que sí llegará la copia de los servidores de Odb, la verdad es que ya en diversas oportunidades ha anunciado lo mismo y nunca ha llegado dicha valiosa información.

Otros factores que contribuyen a este bajón en la lucha contra la corrupción (LCC) son la falta de liderazgo efectivo y públicas descoordinaciones entre los dos equipos que investigan el caso Odebrecht en la Fiscalía; las críticas que recibe esta última del Poder Judicial (PJ); la falta de armonía entre las labores de la Procuraduría, PJ y Fiscalía. Y la ausencia de una estrategia efectiva de esta última frente al caso Odb. Ya en más de una oportunidad hemos advertido que la LCC había decaído.

Por ejemplo, desde hace muchos meses Odb decidió dejar de enviar informaciones sensibles sobre megaproyectos y se concentró en delatar solo sobre los muy publicitados aportes electorales. La razón es muy sencilla: si seguía delatando sobornos en otros megaproyectos, el monto de las reparaciones se elevaría muy significativamente, y eso no le convenía.

Por su parte, la Fiscalía no ha estado haciendo nada efectivo para contrarrestar esa estrategia. Y tampoco tiene una buena capacidad investigativa, por lo que fundamentalmente depende de lo que le pueda dar Odb. El proceso de caída en la LCC estuvo acompañado de una aguda etapa de inestabilidad política.

Posteriormente llegó la distracción generada por las peripecias de nuestro seleccionado de fútbol. Y finalmente el Mundial de Rusia, que prácticamente monopolizó la atención de los medios de comunicación. Pero ya regresó a casa nuestra selección y la Copa del Mundo está por concluir. Por lo que se espera que se reactive la lucha contra la corrupción.

En realidad, todas las movidas de Odebrecht, de sus funcionarios actuales y sus exfuncionarios responden a un cuidadosamente elaborado plan, el que responde a cuatro objetivos:

1) Vender rápidamente sus proyectos (hidroeléctrica de Chaglla, Olmos, etcétera).
2) Pagar lo menos posible por las reparaciones (compensaciones al Estado por los delitos incurridos, sobrecostos, ganancias ilícitas, etcétera).
3) Quedarse a trabajar en el Perú y reanudar sus actividades normalmente.
4) Que a cambio de su colaboración no se penalice judicialmente ni a la constructora ni a ninguno de sus directivos o ex directivos.

Por lo que debemos concluir que el partido por el Lava Jato peruano lo está ganando Odb por goleada: tienen estrategia, equipo cohesionado y liderazgo. Mientras que el equipo local es obvio que no tiene liderazgo ni estrategia, y hay frecuentes peleas entre los principales jugadores.

¿Qué esperan para cambiar, o es que les interesa mantener la situación actual?,
¿A quién beneficia el statu quo?

Es indispensable que terminen las dos estrategias diferentes en la Fiscalía y se concentren en la cooperación eficaz de Odb, a la vez que le exijan que entregue toda la documentación sustentatoria de sus delaciones y refuercen significativamente su capacidad investigativa.

*Manuel Romero Caro

Sirva la Atalaya para poder darle una mirada global y una perspectiva crítica a la economía y entender los temas sectoriales, microeconómicos , y la implicancia que ellos tienen para el país.
Manuel Romero Caro. Economista por la Universidad del Pacífico. Master en economía (Virginia Polytechnic Institute and State University) y Bachiller en Administración de Empresas, además de diversos cursos de post grado en BID, ESAN, University of Notre Dame, etc.
Ha sido gerente general y Presidente de la Corporación Financiera de Desarrollo (Cofide), Decano del Colegio de Economistas del Perú y ministro de Industria, Comercio, Turismo e Integración. Luego fundó y dirigió la consultora Servicios para la Gestión Empresarial y en 1989 creó la revista Gestión que luego se convertiría en el Diario Gestión.
Se ha desempeñado también como Director Ejecutivo de la Unión de Cervecerías Peruanas Backus y Johnston S.A.A. e integrante del Directorio en diversas compañías y gremios como la Cámara de Comercio de Lima ; la American Chamber of Commerce of Perú y la Corporación Andina de Fomento (CAF). En la actualidad, se desempeña como director independiente en diversas empresas.
Jorge Zavaleta Alegre
Editor de Papeldearbol
Corresponsal en Washington DC y Perú
del Grupo El Mercurio de España, Tandil News de Argentina, Panoramica Milán-Bruselas y Diario16 de Madrid.

Tan lejos de dios y tan cerca de EEUU






México con 120 millones de personas, afronta desde este primer día de Julio una nueva era. Un desafío que trasciende a abrir la puerta del poder a la izquierda. Después de 71 años, México exige un cambio de régimen tras dos décadas de alternancia entre los partidos tradicionales, el conservador PAN y el progresista PRD.
  Jorge Zavaleta    11 julio, 2018 0 128   5 minutos de lectura

México, es una tierra tan lejos de Dios y tan cerca de los EEUU, en palabras atribuidas  al general Porfirio Díaz, quien gobernó el país  durante más de 30 años, palabras que  Carlos Fuentes, autor del libro “Gringo Viejo”, menciona también esta melancólica frase.

Andrés Manuel López Obrador, el 1 de julio fue elegido presidente elegido y asumirá funciones el 1 de diciembre del 2018.   Según el editor  de Tandilnews de Argentina, México es país azotado por el narcotráfico y la delincuencia. Territorios tomados en manos de los narcos, una clase política que acuerda con los delincuentes y con estructuras políticas de antaño. El PRI (Partido Revolucionario Institucional) estuvo más de siete décadas en el poder hasta el año 2000. En ese año la sociedad eligió votar algo distinto y devino en Vicente Fox, del PAN (Partido Acción Nacional) que con el paso del tiempo,  los gobernantes se sumergieron en una ola de corrupción sin precedentes en el país azteca.

México es el país de habla hispana más grande del planeta, con la mayor diáspora de su población y  con una economía que es la segunda de América Latina. Los mexicanos tienen visible presencia en California, Texas, Nuevo México, Arizona, Nevada y Colorado, considerando que estos territorios alguna vez pertenecieron a México. También  en Florida, Georgia, Illinois, Nueva York, Oklahoma, Oregón, Idaho, Ohio y Washington.

Morena, el partido de López Obrador, gobernará también la Ciudad de México y obtiene el poder en varias gobernaciones. A los 64 años, el líder de Morena promete una transformación a la altura de la Independencia, la Reforma y la Revolución.

Los países que son vecinos y  más que por fronteras físicas y políticas, están separados por diferencias sociales, económicas y psíquicas muy profundas.

En los años sesenta, del  siglo pasado, por ejemplo  los pobladores  de Benito Juárez   y de El Paso, mantenían una relación relativamente pacífica. Los obreros para los campos texanos, cruzaban la frontera muy temprano, y retornaban por la misma ruta después de cosechar  manzanas,  uvas, sandías y otros frutos para los mercados del Norte. En  tanto, los norteamericanos  cruzaban el mismo puente  del Rio Bravo, para divertirse los fines de semana, cantando  y bailando rancheras y corridos, bebiendo tequila, en mercados  de artesanía mexicana.

Esas diferencias saltan a la vista, y una mirada superficial podría reducirlas a la conocida oposición entre desarrollo y subdesarrollo, riqueza y pobreza, poderío y debilidad, dominación y dependencia.  Desde que los mexicanos comenzaron a tener conciencia de identidad nacional, a mediados del siglo XVIII, se interesaron en sus vecinos.

En suma, la historia de ambos países es la de un mutuo y pertinaz engaño, generalmente —aunque no siempre— involuntario. Una mirada más amplia, la oposición entre México y los Estados Unidos pertenece a la dualidad Norte/Sur, remarcan Octavio Paz y Carlos  Fuentes en su frondosa producción literaria.

La gran oposición de la América precolombina —en el territorio que ahora ocupan Canadá, Estados Unidos y México— no fue, como en el Antiguo Mundo, entre civilizaciones distintas, sino entre modos de vida diferentes: nómadas y sedentarios, cazadores y agricultores.

Esta división tuvo una gran influencia en el desarrollo posterior de los Estados Unidos y de México. Las diferencias entre los españoles e ingleses que fundaron Nueva Inglaterra y Nueva España no eran menos acusadas y decisivas que las que separaban a los nómadas de los sedentarios.

Independientemente de su modo de vida, los españoles y los ingleses compartían los mismos principios y la misma cultura intelectual y técnica. Sin embargo, la oposición entre ellos era tan profunda, aunque de otro género, como la que dividía a un azteca de un iroqués.

España realizó su precaria unidad política, no nacional, a través de alianzas dinásticas. Su historia y la de sus antiguas colonias, desde el siglo XVI, es la de  ambiguas relaciones —atracción y repulsión— con la edad moderna.

Conquista y evangelización: estas dos palabras, profundamente españolas y católicas, son también profundamente musulmanas. Los dominios españoles nunca fueron realmente colonias, en el sentido tradicional de esta palabra: Nueva España y Perú fueron virreinatos, reinos súbditos de la Corona de Castilla como los otros reinos españoles.

En cambio, los establecimientos ingleses en Nueva Inglaterra y en otras partes fueron colonias en la acepción clásica del término, es decir, comunidades instaladas en un territorio extraño y que conservan sus lazos culturales, religiosos y políticos con la madre patria.

Esta diferencia de actitudes se combinó con la diferencia de condiciones culturales que encontraron los ingleses y españoles: indios nómadas y sedentarios, sociedades primitivas y sociedades urbanas.

La política española frente a los indios tuvo una doble consecuencia: por una parte, al reducirlos a la servidumbre, se convirtieron en una mano de obra barata y fueron la base de la sociedad jerárquica novo-hispana; por la otra, cristianizados, sobrevivieron lo mismo a las epidemias que a la servidumbre y fueron una parte constitutiva de la futura nación mexicana.

El cristianismo que trajeron a México los españoles era el catolicismo sincretista romano que había asimilado a los dioses paganos, convirtiéndolos en santos y diablos. El fenómeno se repitió en México: los ídolos fueron bautizados y en el catolicismo popular mexicano están presentes, apenas recubiertos por una película de cristianismo, las antiguas creencias y divinidades.

Lo indio impregna no sólo la religión popular de México sino la vida entera de los mexicanos: la familia, el amor, la amistad, las actitudes ante el padre y la madre, las leyendas populares, las formas de la cortesía y la convivencia, la cocina, la imagen de la autoridad y el poder político, la visión de la muerte y el sexo, el trabajo y la fiesta. México es el país más español de América Latina; al mismo tiempo, es el más indio.

La civilización mesoamericana murió de muerte violenta pero México es México gracias a la presencia india. Aunque la lengua y la religión, las instituciones políticas y la cultura del país son occidentales, hay una vertiente de México que mira hacia otro lado: el lado indio.

México, en la literatura más selecta, es  un pueblo entre dos civilizaciones y entre dos pasados. En los Estados Unidos no aparece la dimensión india. Ésta es, a mi juicio, la diferencia mayor entre los dos países. Los indios que no fueron exterminados fueron recluidos en las «reservations».

La memoria histórica de los norteamericanos no es americana sino europea. De ahí que una de las direcciones más poderosas y persistentes de la literatura norteamericana, de Whitman a William Carlos William y de Melville a Faulkner, haya sido la búsqueda (o la invención) de raíces americanas. Voluntad de encarnación, obsesión por arraigar en la tierra americana: a este impulso le debemos algunas de las obras centrales de la época moderna.

Gran tarea para López  Labrador  y Morena, su partido, en un México, cuya capital, fue levantada sobre las ruinas de México-Tenochtitlán, la ciudad azteca, que a su vez fue levantada a semejanza de Tula, la ciudad tolteca, construida a semejanza de Teotihuacán, la primera gran ciudad del continente americano.

Esta continuidad de dos milenios está presente en cada mexicano. No importa que esa presencia sea casi siempre inconsciente y que asuma las formas ingenuas de la leyenda y aun de la superstición. No es un conocimiento sino una vivencia. La presencia de lo indio significa que una de las facetas de la cultura mexicana no es occidental, remarcan numerosas voces académicas y populares del México de la Opera de Frida y Diego, que baila en su Teatro de Bellas Artes, en el mero centro de la Ciudad o en los barrios más olvidados, detrás de los cerros de Acapulco, que mi máquina fotografió para ilustrar mis primeras crónicas de periodista latinoamericano.

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Jorge Zavaleta
Es Periodista, Licenciado en Ciencias Sociales y Filosofía. Co-fundador de Gestión, primer diario de economía y negocios del Perú. Oficial de prensa del BID, autor de cinco libros sobre America Latina y ahora, Corresponsal del Diario16 de Madrid, desde Washington y Lima.
papeldearbol@gmail.com