Papel de Arbol

miércoles, 20 de abril de 2011

LIMA Y EL SUEÑO DE LOS RASCACIELOS

Jorge Zavaleta Alegre

Unaa inmvestigación de 20 años
 El inconfundible aporte de los EEUU a la arquitectura fue el rascacielos, cuyas líneas audaces y vigorosas lo han convertido en el símbolo de la energía capitalista. El primer rascacielos, gracias a la invención del ascensor, fue erigido en Chicago en 1884.
Este retrato de los EEUU bulle como un sueño dorado en el Perú de los empresarios, banqueros, profesionales de la construcción y de las instituciones públicas. Y al mismo tiempo un profundo descuido de la calidad de la vivienda para millones de pobladores, con el estigma del tugurio, “fuente de la violencia, de otros males sociales y también de gentes marcadas por la desesperanza”, tomando una explicación del arquitecto Adolfo Córdova Valdivia, al comentar un estudio de 22 años del Centro de Promoción Urbana.
Algunas cifras. En este país de casi 39 millones de habitantes, la pobreza en viviendas con hacinamiento afecta a 15 millones de personas. La vivienda tugurizada solo en 13 distritos de Lima supera 122 mil unidades con una población superior a las 650 mil personas, según el Censo Nacional 2007.
Hace cinco años el Ministerio de Vivienda estimó que del déficit habitacional calculado en 1 millón y medio de unidades, el 82% correspondía al déficit cualitativo, a la vivienda deficiente. No obstante, la acción estatal y privada se privilegia la edificación de nuevas viviendas, por ausencia de liderazgo de las municipalidades para establecer políticas y emprender proyectos de renovación urbana.
Esta aguda cara del subdesarrollo, según el Arq. José Arispe, Decano del Colegio de Arquitectos de Lima, compromete seriamente al encontrar respuestas imaginativas como la del “CEPROMUR: Una Reflexión desde la práctica”, al mismo tiempo que comenta el programa de la Beneficencia Pública de Lima sobre la transferencia de unas 300 antiguas viviendas para buscar la recuperación social de la ciudad.
Para el gremio de arquitectos y profesionales afines, este proyecto debería estimular la participación de las familias que las habitan esas viviendas, algunas del siglo XIX, complementado con el apoyo técnico y normativo de la Municipalidad, del sector privado y del Estado.
Luz Estremadoyro, Directora de CEPROMUR, incluye la iniciativa de impulsar un Fondo para la Vivienda Popular y demuestra que el problema del tugurio se ha convertido en un hecho consciente. “Familias y dirigentes están decididos a incidir en el Estado para que se les restablezca el derecho a vivir con dignidad, albergando esperanza de que las nuevas generaciones se desarrollen sin vergüenzas, temores ni limitaciones”, remarca Luz Estremadoyro y su equipo integrado por Carmen Rosa Uceda, Aurea Obregón y Carmen María O’Phelan, en una publicación con el apoyo de Holanda.
Elsy Bravo, de Foro Educativo, considera que el tugurio no es solo la vivienda sino los valores, la dimensión humana, que puede salir sin asistencialismo, sino articulando formas de empleo, de educación y espacios recreacionales. “Los procesos de renovación son una lección para gobernantes en el tema de la vivienda”.
LOS DESENCUENTROS DEL BID CON LA REALIDAD
El equipo de Cepromur recuerda que hace 10 años, recibió el encargo de la Municipalidad Metropolitana y el BID para realizar un inventario socio cultural y físico en el Centro Histórico de Lima - Barrios Altos.
Sin embargo, la información excepcional, “no ha producido una adecuada coordinación entre Estado y sociedad civil, porque las iniciativas financiadas por la costosa fuente multilateral, “son inviables de antemano, por no incorporar en la trama social los tugurios. Hay una prevalencia de un enfoque de promoción a la inversión privada financiera y de construcción civil”
Queda también en evidencia que los empresarios y financieras de la construcción civil no conocen o lo ignoran el mercado social de los estratos D y E. Lo califican de alto riesgo e históricamente no lo han considerado como una demanda solvente para Lq banca.
EL MAPA DE LA DESESPERANZA
En opinión del Arq. Adolfo Córdova, Director de Postgrado de la Facultad de Arquitectura, Arte y Urbanismo de la UNI, la más antigua, del país “nadie discute ya la coincidencia entre el mapa de la violencia, del vicio y del delito con el mapa de las zonas tugurizadas de las ciudades”.
“Es terrible que los tugurios producen gentes de comportamientos antisociales y también gentes marcadas por la desesperanza”, explica el profesor Córdova Valdivia, después de poner en relieve y discusión los temas de la renovación urbana, la alternativa del desarrollo urbano, la tugurización, la participación vecinal y la ciudad inclusiva.
Según la jerga de las Naciones Unidas el Desarrollo Inclusivo es el proceso mediante el cual se diseñan e implementan acciones y políticas públicas para el desarrollo socio-económico y humano, que aseguran el fomento de las capacidades y la igualdad de oportunidades y derechos para todas las personas, independientemente de su condición social, género, edad, condición física o mental, etnia, religión, opción sexual, etc., en equilibrio sustentable con el ambiente.
Intervención en Centro Histórico de Lima
  En consecuencia luchar contra la precariedad física del tugurio, implica la búsqueda del desarrollo personal, incluyendo el aspecto legal - derecho a la vivienda, función social de la propiedad, aprovechamiento social de la plusvalía urbana, etc. -, aspectos que aún no son considerados en nuestra realidad.
En el tugurio, está presente la pobreza y la falta de empleo. Y cualquier solución demanda la intervención del Poder Ejecutivo, Legislativo, del gobierno local, para aplicar la Ley de Renovación Urbana y la creación del Fondo de Renovación Urbana.
Diversos especialistas coinciden en señalar que existen proyectos de intervención de algunas organizaciones que son lecciones aprendidas, porque muestran en detalle los pasos del proceso, la capacitación, la supervisión, la incidencia política y la eventual presión social.
MOLINO DE SANTA CLARA
La remodelación del Molino de Santa Clara y su zona de influencia, mejoramiento de escuelas y centros de salud, son entre otras, una interesante señal de Cenpromur, porque suma a sus valores históricos, monumentales, arquitectónicos y urbanísticos, las posibilidades de convocar toda una gama de aspectos, restauración, rehabilitación y obra nueva, además de la puesta en valor del entorno.
ALGUNAS RECOMENDACIONES
Las organizaciones que trabajan el tema de la renovación urbana de Lima consideran que es imprescindible el liderazgo de la Municipalidad Metropolitana y de municipios distritales, y que esta intervención considere preferentemente a los ocupantes de los tugurios.
Igualmente, esas mismas organizaciones consideran que es importante apoyar la creación del Fondo de Vivienda Social, cuya administración puede asumir la Caja Municipal.
Otro elemento. El Estado peruano estima que no más del 15% de las municipalidades el país cuentan con un Plan de Desarrollo Urbano, mientras que el déficit de planes urbanos a nivel de los centros poblados es todavía mayor.
En este contexto, el Manual para la elaboración de estos planes de desarrollo del Ministerio de Vivienda puede ser un elemento o punto de partida, toda vez que ha sido elaborado en el marco del Plan Binacional de Desarrollo de la Región Fronteriza Perú-Ecuador, cuyas poblaciones, en su mayor parte, están alejadas de cualquier posibilidad de integración urbana y regional.