Papel de Arbol

jueves, 28 de julio de 2011

EL PROYECTO NACIONES DEL SUR

Jorge Zavaleta Alegre
Primer equipo ministerial de Huamala
 ”Seguramente, escribía Bolívar, la unión es la que nos falta para completar la obra de nuestra regeneración”, recordó el flamante presidente Ollanta Humala en su primer discurso desde el pleno del Congreso de la Republica y ante varios Jefes de Estado.
El Perú se ha incorporado formalmente a la marea rosada de América del Sur con un programa de alto contenido social, después de juramentar en nombre de los principios de la Constitución de 1979, la cual establece una economía social de mercado. Así - se suma al pensamiento y acción de los principales vecinos de Bolivia, Uruguay, Brasil y Venezuela, no para copiar un modelo de desarrollo, sino para que la integración regional permita avanzar en la inclusión social, y lograr que los derechos y oportunidades sean más equitativos. Este también es el sentido de la Declaración de Lima, suscrita por los gobernantes de UNASUR.
Sin embargo, la derecha más conservadora, acostumbrada a las formas y conceptos de la neoliberal carta constitucional de 1993, pretende cuestionar la legitimidad de esta nueva administración. El programa de Gana Perú, conocido durante la campaña electoral y que la mayoría de la ciudadanía respaldó con su voto, no pretende retornar al estatismo como base de la economía sino a recoger lo mejor del libre mercado que los pueblos han podido lograr con una mediatizada práctica concertadora y de participación popular.
Los enemigos del desarrollo de América Latina utilizan diversas armas para desautorizar el pensamiento renovador. De allí la importancia del pensamiento de Bolívar, San Martín, Víctor Andrés Belaúnde, Víctor Raúl Haya de la Torre, José Carlos Mariátegui y otros intelectuales, que apostaron por la unidad de una región tan rica culturalmente y abundante en recursos naturales.

Marisol Espinoza, primera vicepresidenta de Gana Perú
El crecimiento macroeconómico, fruto del libre intercambio, no ha repercutido, como lo esperaban los pobladores rurales y de la periferia de las ciudades. De allí la potencialidad de un Consejo Económico Social, que al estar integrado por ministros, empresarios, gremios laborales y organizaciones de la sociedad civil, pueda hacer viable el Acuerdo Nacional, que promovieron los ex presidentes Paniagua y Toledo.
Dicho Consejo, junto al restablecimiento de las Asambleas Regionales y Locales, complementará la dinámica de la descentralización, proceso que tampoco ha caminado con la celeridad esperada, por la ausencia de un Estado moderno. En este entorno, despierta expectativas la anunciada Cumbre Presidencial Regional Antidrogas, con presencia de los países productores y consumidores, así como el anunciado acercamiento a diferentes bloques regionales y del planeta, sin considerar diferencias ideológicas.
El Banco Central de Reserva del Perú, que seguirá gozando de autonomía, tiene reservas internacionales nunca registradas en la historia nacional. El ex presidente García, en su primer gobierno de 1985 – 90 dejó vacías las arcas fiscales. Ahora, la promoción de la inversión privada en el último quinquenio generó importantes compromisos de inversión. Hay elementos claros para no abandonar lo andado.
El discurso integracionista retorna como una necesidad insatisfecha. Pues la patria chica o grande será vigente si se comparten logros y desafíos. Bolívar le dijo a Sucre, su lugarteniente, que aunque fuera cierta la desmembración de las cinco repúblicas, se abstuviera de creer.