Papel de Arbol

viernes, 16 de abril de 2010

PERU: 100 AÑOS FORMANDO ARQUITECTOS


Jorge Zavaleta
Alegre                               
El Perú celebra
el 30 abril del
2010 el primer
siglo de creación
de su más
importante centro
académico de
formación 
de arquitectos
por iniciativa
del Estado.
El momento, coincide como lo afirma David Harvey, con un ambiente  de “destrucción creativa”
no solo de las instituciones permanentes sino de las formas tradicionales de la soberanía estatal, de las divisiones del trabajo, de las relaciones  sociales, las áreas departicipación social,  de las combinaciones tecnológicas y de pensamiento, de las actividades de reproducción, de los vínculos con la tierra y de los hábitos del corazón.
La actual densificación urbana, convierte a la construcción en el sector que lidera el crecimiento macroeconómico nacional y al mismo tiempo inseguridad y violencia social, por los altos déficits de servicios públicos en salud, transporte y vivienda.
Lima en 1910 apenas tenía 150 mil pobladores. Ahora bordea los 9 millones, un tercio de la población nacional. Los EEUU empezaban a concentrar sus actividades financieras, comerciales y en transporte. A diferencia del capital inglés, participaba en la producción directa de materias primas agrícolas y especialmente mineras, generando el crecimiento de una burguesía local.


En ese entonces el manejo de la geografía regional pasaba por la definición de diversos protocolos internacionales, en tanto discurrían conflictos de baja de densidad como los combates de Guayabal, entre Perú y Bolivia; con Brasil en el Purús y el Yurúa; con Ecuador, en Angoteros y Torres Causana; y con Colombia, el combate de La Pedrera. Inclusive, el Rey de España, en vista de la disparidad de opiniones, resolvió inhibirse de dictar el laudo arbitral de Ecuador-Perú, y dejo a las partes con la responsabilidad de continuar por si solas en su arreglo limítrofe. Jorge Chávez se convierte en el pionero de la aviación mundial, remontando los Alpes.


Augusto B. Leguía, Ministro de Hacienda (1903) y Presidente del Perú (1908 – 1912 y 1919 – 1930) consideraba que la disgregación de la clase propietaria era uno de los principales factores para el retardo de la economía peruana. Para él, la centralización del aparato estatal, era primordial, teniendo como único interlocutor político económico a la burguesía, y aislando a la clase terrateniente, arrasada en 1969 con Velasco Alvarado, y rediseñada y modernizada a finales del siglo XX y lo que va del XXI.
Durante el oncenio de Leguía (1919-1930) hubo significativas inversiones en modernización urbana, privilegiando a la capital, donde se construyó la planta de tratamiento de agua potable de La Atarjea. Y en el quinquenio 1920-25 se intensificó el alza de las inversiones en la modernización de servicios urbanos.


En este contexto, la Universidad Nacional de Ingeniería comienza a tener un mayor rol, desde su Escuela de Ingenieros que consideró la enseñanza del curso de arquitectura para la sección de Construcción Civil.
Un significativo antecedente académico de la profesión Arquitecto se ubica en 1876 cuando se funda la Escuela Especial de Construcciones y Minas, por iniciativa del Presidente Manuel Pardo y La Valle, pensador positivista, fundador de la denominada República Práctica.
La creación de la especialidad de Arquitectura fue una respuesta al inicio de un proceso de demolición de las murallas de Lima. A partir de 1869 Lima empieza su plena expansión y transformación urbana y surgen nuevos espacios y nuevas arquitecturas de variadas tipologías, con una alta demanda de constructores.


Estos antecedentes culminan el 29 de Abril de 1910 con el Decreto Supremo del presidente Leguía, que crea la Escuela de Arquitectos constructores, para completar la enseñanza especial que daba la Escuela de Ingenieros. Malachowsky, con estudios en la Escuela Especial de Arquitectura y Escuela de Bellas Artes de París, fue contratado para hacerse cargo de la nueva sección. También acompañaron en esta primera etapa los arquitectos Enrique Bianchi y Bruno Paprowsky.
La FAUA, en la presente década 2000 – 2010, es la más importante facultad de arquitectura de las 19 que existen en el Perú, y cuenta con 445 miembros, de los 6600, que tiene el Colegio de Arquitectos del Perú. De esta Facultad ha egresado la mayoría de docentes de la especialidad para el resto de universidades.


Los arquitectos, junto con Ingenieros y otras especialidades, enfrentan una problemática de masiva migración campo-ciudad ya no para poblar inhóspitos desiertos. Esa etapa de los últimos cincuenta años ya concluyó.
El proceso reclama garantías jurídicas y calidad en la construcción y alienta profesionales y académicos en el ámbito de formulación de proyectos de diseño, constructivos y de desarrollo en los nuevos asentamientos, con una perspectiva humanista.


La actual participación del Arquitecto en el acelerado proceso de densificación urbanística, se ve limitada, porque la política de libre mercado arrasa con los principios de seguridad y calidad arquitectónica. Ha desaparecido el concurso público arquitectónico en las inversiones del Estado. El gremio libra una batalla jurídica ante el Congreso de la República para cambiar los alcances de la Ley 29090, promovida por las grandes constructoras, y desaprobada por los municipalidades, los gremios de arquitectos y de ingenieros, mientras la desorientada población afronta el riesgo de vivir en las tierras sísmicas del Círculo de Fuego del Pacífico, sin mayor protección del Estado.
El Perú vive una etapa en la que “el contrato temporal” sustituye a las instituciones permanentes en la esfera profesional, emocional, cultural y familiar así como en los asuntos políticos. Mattehu Arnold señala que “la libertad es un caballo muy bien hecho para cabalgar sobre él, pero para ir a algún sitio”.


REFERENCIAS ACADEMICAS
Fue el presidente Manuel Pardo, quien promulgó la primera ley de educación de la etapa republicana, con el nombre de Reglamento General de Instrucción Pública y en su artículo 343 se establece que: “Habrá cuatro escuelas de aplicación: la Escuela de Ingenieros Civiles y de Minas, la Escuela Superior de Agricultura, la Escuela Naval y la Escuela Superior de Artillería y Estado Mayor”.


La reforma universitaria de 1931 modifica la estructura curricular para dar mayor especificidad y actualización a la formación profesional del arquitecto. Durante esa década se contó con nuevos profesores como Rafael Marquina y Bueno, egresado de la Universidad de Cornell, Emilio Harth Terré (primer titulado de la sección), Héctor Velarde y Fernando Belaunde Terry con estudios en Texas, entre otros.
Otra reforma, en la década del 40 dio lugar a la creación del Departamento. En 1947 surge la "Agrupación Espacio", liderada por Luis Miró Quesada Garland, movimiento que dio lugar a polémicas entre las tendencias modernas y el pensamiento de entonces.
La excelencia académica de esa facultad trascendió los límites nacionales cuando Fernando Belaúnde Terry, asumió funciones de decano en 1955 de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Artes y en 1962 es elegido Presidente de la República.


En 1968 una reforma gubernamental suprimió las facultades y creo los programas académicos. En 1984 retorna el sistema de facultades, y con la Ley universitaria aún vigente, asumió el decanato de la Facultad el arquitecto Javier Sota Nadal, quien después fue Rector de la UNI por 2 períodos consecutivos, presidente de la Asamblea Nacional de Rectores, Ministro de Educación y actual Decano del Colegio de Arquitectos del Perú.


En su gestión se creó la sección de Postgrado con especialización de Arquitectura y al incorporarse el ex-Instituto de Planeamiento de Lima se incluyó la Maestría en Planificación Urbana como otra especialidad de esta sección.
La Facultad de Arquitectura de la UNI, en su sección de antegrado, otorga el Bachillerato y el Título Profesional de Arquitecto. Hoy su propuesta académica es mejorar y mantener el prestigio educativo en la Sección de Postgrado, a través de la Maestría o Segunda Especialización.
Lima, abril 2010