Papel de Arbol

jueves, 24 de mayo de 2012

El nuevo rostro de la pobreza: la infancia

esto lo arreglamos nosotras: El nuevo rostro de la pobreza: la infancia: No será por noticias. Vivimos días inciertos , apenas encendemos la radio, la televisión, repasamos algún periódico o entramos en la re...

PETROLEO Y DESARROLLO ECUAPERUANO


Refinería  Talara y aire limpio.-
Jorge Zavaleta Alegre- Cambio16-Madrid.-
El primer pozo petrolero que comenzó a ser explotado  en América Latina sucedió en  1863 en Zorritos, en los lugares denominados  de Belleveu y Bebedero, sobre el río Tumbes. Después fue en Negritos, Lobitos, Talara…, pero la actividad se detuvo por efectos del Guerra del Pacífico, señalan investigaciones de George Petterson un alemán interesado en indagar la riqueza del mar y el desierto ecuatorial.
En esa época en Tumbes no existía un puerto  para  proseguir con la  aventura industrial, y el petróleo tenía que ser trasladado hasta un vapor con ruedas posibilitaba su acercamiento a la playa.  Esta actividad en pocos años se convirtió en fuente de vida  para  Zorritos  y provincias vecinas.
Por esos antecedentes, la desactivación de la Refinería Talara, en la década del noventa  como parte de la fiebre privatizadora,   provocó, sin duda  una profunda crisis, que aún persiste. Para enfrentar esa realidad el Estado, a través de una ley específica,  ha decidido   modernizar esa refinería, que es el primer proyecto de mayor dimensión en los últimos 25 años.
Un primer paso en ese horizonte es  la reciente firma de una Carta Mandato entre Petroperú y Société Générale para lograr un servicio de estructuración financiera integral, a un costo estimado es 1,700 millones de dólares para ser pagados en un plazo de quince años, según estimaciones de COFIDE.
  La reactivación de Talara proyecta la generación de más de ocho mil empleos directos entre los campamentos, viviendas, pistas, carreteras, agua salubridad y otras actividades gravitantes en esa ciudad y la región norte. Ya comenzó la capacitación para  600 jóvenes electricistas.
Una noticia  que coincide con las demandas de los ecologistas y los amigos del Aire Limpio,  se relaciona con la salud. La modernización de esa refinadora permitirá disponer de un combustible menos contaminante.  Un cálculo del Banco Mundial señala que para atender los efectos de contaminación se debe destinar unos 7 mil dólares anuales. La reducción de azufre en los combustibles de 1,800 partes por millón a 50 partes por millón, mejorará  la calidad del aire en todas las regiones del país generando un ahorro de gastos de salud y que en el Perú  puede llegar hasta los 460 millones de dólares anuales.
La Refinería Talara, según explica los expertos,  se convertiría  en una de las cinco más modernas refinerías de América Latina y su dinámica incidirá en  otras refinerías como  Repsol que también produce gasolina con alto contenido de azufre.  
El conglomerado empresarial que llevará adelante el proyecto  peruano está integrado por Société Générale, en cuanto a la estructuración financiera. Adicionalmente, se contratará a una empresa que hará la evaluación económico-financiera y así garantizar la viabilidad de la inversión. Las proyecciones de Petroperú certifican la viabilidad del proyecto. Además, se contará con asesoría para el estudio de mercado y precios.  Société Générale fue escogida a través de un proceso de selección que Petroperú encargó a la Corporación Financiera de Desarrollo (COFIDE). El contrato con la española Técnicas Reunidas, comprende la ejecución de la ingeniería de detalle y la adquisición de equipos y construcción.
COFIDE y Petróleos del Perú reviven responsabilidades comunes en la década del setenta. Una de ellas fue la construcción  del oleoducto norperuano, que sigue ofreciendo un buen servicio. Ahora   proseguirá con su apoyo en las labores que desarrolle el banco estructurador. 
A manera de conclusión, el compromiso de las financieras europeas revela también el interés  en América Latina y especialmente en el Perú que se encuentra en pleno crecimiento y en busca de desarrollo inclusivo, cuando las economías del viejo mundo  atraviesan por serias limitaciones financieras.