PARA ALGUNOS traductores, la expresión quechua “¡Anchata munankuykin sunquchallay!” es un equivalente al inglés “I love you” o a la fría frase castellana “te quiero mucho”. Pero su significado fidedigno, en cambio, es más musical y tierno. Algo así como “¡yo te quiero mucho, corazoncito mío!”
Esta
es una explicación del periodista hispano y quechuahablante Demetrio
Túpac Yupanqui, quien está convencido de que la construcción de un mundo
mejor en América Latina puede encontrarse en la educación intercultural
bilingüe.
Abundan las propuestas de políticas
educativas en contextos multilingües, pluriculturales y multiétnicos.
Sin embargo, la aplicación de los distintos programas encuentra
obstáculos infundados, irracionales.
No
obstante, hay antecedentes históricos que marcan la presencia de El
Quijote de la Mancha cabalgando en los Andes. La traducción de la obra
de Cervantes al idioma andino opera como testimonio de la resistencia de
una lengua nativa, como el quechua, que actualmente hablan 20 millones
de personas a lo largo de toda Sudamérica.
Frente
a la imposición del español como lengua oficial en América, también
destaca en la edición de ilustraciones propias del pueblo Sarhua,
conocidas como “tablas”, que recrean el trabajo comunitario, y enfatiza
la solidaridad colectiva, opina Luis Millones en su trabajo etnográfico
Amor brujo (1989).
Si nos atenemos solo a las
lenguas amerindias, en la región se hablan entre 400 y 450 idiomas y un
número mucho mayor de dialectos o variantes de aquellos.
Los
lingüistas latinoamericanos cumplen una loable, compleja y
controversial labor para promover las lenguas nativas, cual Torre de
Babel.
En este grupo destaca Demetrio Túpac
Yupanqui, traductor del Quijote en quechua. Su trabajo académico permite
que la obra de Miguel de Cervantes se pueda leer en el idioma de los
incas. La traducción y adaptación de Túpac Yupanqui lleva el título:
Yachay sapa wiraqucha dun Qvixote Manchamantan.
El
copyright ha sido asignado al peruano Miguel de la Quadra-Salcedo y
los derechos de edición a un conglomerado periodístico local, miembros
de la Academia Yachay Wasi, fundada por Túpac Yupanqui hace seis
décadas.
El quechua, instrumento ideal para
establecer eldiálogo y buscar consensos con las comunidades andinas,
está presente en las aulas de Yachay Wasi.
La
labor del periodista quechuólogo tiene antecedentes. Se recuerda el
estreno de El Quijote, en Ayacucho, Pausa, cerca de Oyolo, el 19 de
octubre de 1607, día en que, figuradamente, El Quijote salió del libro
para viajar por los Andes.
Publicado: 12/02/2014
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