Petróleo y cultura
Escribe: Jorge Zavaleta Alegre | Opinión - 14:29h
La historia de Petroperú está ligada a la cultura nacional. Las Ediciones Copé, desde La Abeja Republicana, en 1971, hasta la actualidad, es un sello de prestigio que permite el mayor conocimiento del valor de nuestros recursos no renovables más preciados, y al mismo tiempo los diferentes aportes literarios, históricos y artísticos.
Copé (sinónimo de brea, de luz), representa más de cien títulos, cuyos contenidos son apreciados por la comunidad académica, científica y cultural.
La reactivación de esta empresa ha permitido conocer mejor la tendencia mundial por realizar una explotación energética más responsable, alentando medidas necesarias para reducir el impacto ambiental, tal como lo establece la Ley de fortalecimiento y modernización de esta organización productiva en el proyecto de la refinería de Talara, llamando la atención de consorcios de Europa, Asia y América.
Más allá del propio quehacer empresarial, es decir de la producción y comercialización de hidrocarburos, Petroperú ha buscado la presencia en la promoción del acervo cultural nacional, en concordancia con el pensamiento interdisciplinario que plantea la globalización.
Tenemos que reconocer que la más sólida y recordada decisión empresarial ha sido su contribución al restablecimiento, después de casi tres décadas, de los Premios Nacionales de Cultura. El franciscano presupuesto del joven Ministerio de Cultura fue superado con el auspicio y la participación de Petroperú S.A.
El Premio Nacional de Cultura 2012 es una prueba de reconocimiento, un respaldo institucional a los artistas y gestores que lo ameriten.
La comunidad nacional, las comunidades de los Andes y la Amazonía y los millones de peruanos que viven en el exterior pueden apreciar la obra de destacados artistas, creadores, investigadores y preservadores del arte y la cultura, así como instituciones, colectivos y empresas dedicados a la gestión y promoción en este campo.
El Centro Cultural de Petroperú se ha convertido en uno de los más dinámicos del país. Las sucesivas exposiciones de pintura, presentaciones de libros de destacados autores nacionales publicados por editoriales privadas, se suman al valor de los Premios Nacionales de Fomento a la Cultura creados en setiembre de 1942, mediante Ley Nº 9614, con 12 categorías y que eran entregados anualmente.
En 1966, la cantidad de premios creció hasta llegar a 18 categorías hasta que en la década de los 80, comenzaron a convocarse de manera esporádica. El relanzamiento de este galardón, ha implicado el funcionamiento de una nueva estructura de convocatoria.
En suma, tanto Copé como los Premios Nacionales de Cultura, las becas estudiantiles y los programas de responsabilidad social, posibilitan conocer la policromía cultural del Perú. La tarea cultural Petroperú deberá mantenerse, porque hace avanzar el conocimiento, la creatividad y la cultura. Faltaría más recursos para el cine nacional, el medio más efectivo para llegar a las grandes colectividades.
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