Huyendo sin destino
elmercuriodigital.- julio 28, 2020
Jorge Zavaleta Alegre
Eastern de Inglaterra. United Airlines. Embajada de los EEUU. Gobierno del Perú. Estas cuatro instituciones asumen el acuerdo para trasladar desde Lima a Norteamérica a los ciudadanos o residentes que tienen urgencia de retornar al país del Norte.
Los viajeros que han cumplido los trámites respectivos, son convocados en la sede de la embajada norteamericana. Después de entregar los documentos pertinentes son trasladados al Grupo Aéreo N° 8, dependencia del Aeropuerto Jorge Chávez. La partida es a las 15.00 horas y el vuelo directo a Miami llega a las 21.00 horas.
Un grupo se traslada a Nueva Jersey. Y desde el Newark Liberty los pasajeros emprenden el viaje de enlace con otros 51 estados, considerando que Miami es la virtual capital de Latinoamérica, de la migración de todos los que residen al Sur de Río Bravo.
Y porqué el aeropuerto de Lima lleva el nombre de Jorge Chávez?. El nació en París 1887. Sus padres fueron los peruanos Manuel Gaspar Chávez y María Rosa Dartnell. Estudió en Violet de Electricidad y Mecánica Industrial. Desde muy joven sintió afición por la aviación, convirtiéndose en piloto y participando en diversos concursos de altura, ganando en varios de ellos.
En 1910 participó en el concurso para cruzar la Cordillera de los Alpes por el paso de Sinplón, desde Briga (Suiza) a Domodossola (Italia). Después de lograr la hazaña se dispuso al aterrizaje, pero faltando 20 metros las alas del aeroplano se quebraron y la nave se estrelló. Tres días después, el gran aviador falleció en el Hospital "San Biagio" de Domodossola. Siendo sus ultimas palabras: "Arriba, siempre arriba... hasta las estrellas", lema que honra la Fuerza Aérea del Perú.
Las instituciones representativas han asumido la responsabilidad de trasladar a los EEUU, a norteamericanos que urgen regresar a su país y peruanos con residencia o con segunda nacionalidad que provienen de diferentes regiones del país andino. Algunos de los pasajeros realizan su primer viaje. Y la ilusión de ver al hijo-hija-padre-madre, es infinita. Porque les asste la idea de seguridad que ofrece los EEUU.
María De Soto, ciudadana de Andahuaylas, viaja con una maleta repleta de manjares para sus nietos, y nos recuerda a la tierra de José María Arguedas, autor de " Todas las sangres", una historia de las transformaciones culturales y económicas de latifundistas, y las consecuencias del proceso de modernización.
La viajera rechaza la mascarilla, por encima de las normas de prevención para que el virus no acabe con la vida del planeta. Inclusive rechaza al compañero de asiento, paisano que la acompaña hasta el Estado de Pensilvania. La autoridad del aeropuerto, logra que María respete las indicaciones.
Otro pasajero, más precavido, porta un certificado médico que no registra ningún síntoma de la pandemia: "...y las líneas de detección que no hay nuevos anticuerpos contra coronavirus y el resultado es negativo", suscriben dos médicos de prestigio que autorizaron la extracción de una muestra de sangre en el domicilio del viajero.
Una psicóloga y administradora de empresas, envió a su padre la ruta para llegar a la pequeña ciudad de Maryland, uno de los 52 Estados de la Unión. Para más referencia indica que esta ciudad es sede de la primera universidad fundada por España en EU. La primera fue creada en Perú con el nombre de Universidad Mayor de San Marcos.
Por cierto, ella no podía ir al aeropuerto. Washsington Dulles. El taxi que recogerá su padre es inmigrante de Pakistán desde 1960. Se llama Erick Shaiki, avanza rápido, las pistas están libres, solitarias, pero una lluvia de verano, muy fuerte, obliga a guarecerse en un café, pero está cerrado, como todos los centros comerciales de la ruta y como sucede también en su país de origen atrapado por la pandemia.
Dos horas después llega al destino, y el padre se reencuentra con su familia, con los mismos recursos que se utilizan en Lima...Los familiares tienen la boca y nariz cubierta de una mazcarilla de fondo negro con estrellas. Una alegoría a la protección que cumple cada miembro de la Unión.