Jorge Zavaleta Alegre Corresponsal
TIME,- Los gobiernos de toda America Latina y el Carbe han decidido emprender una accion permanente para lograr que Hati supere su condicion de extrema pobreza. Los EEUU y Republica Dominicana lideran este respaldo para lograr que Haití deje de ser la republica más pobre de América y de las más pobres del planeta.
Esta decisión fue asumida en la novena Cumbre de las Américas realizada en Junio del 2022, siguiendo los fines de esta organización creada por el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, en diciembre de 1994 en Miami (Florida)
La Novena Cumbre de las Américas tuvo lugar en Los Ángeles (California), la segunda ciudad más grande de los EEUU y tiene profundos lazos con el hemisferio. Los Ángeles alberga la mayor comunidad hispana/latina de Estados Unidos.
La Cumbre impulsa el crecimiento económico y la prosperidad en la totalidad de las Américas sobre la base de valores democráticos comunes y la promesa de aumentar el comercio de todos los pueblos y preservar los recursos naturales del hemisferio para las generaciones futuras.
El actual presidente de la Republica Dominicana, Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno e investido el 16 de agosto de 2020, como miembro de esta cumbre, hablo de la situación crítica que vive la población haitiana como consecuencias de los terremotos y ahora la pandemia de covid-19.
Con más de 11 millones de habitantes, un 60% de la población supervive por debajo del umbral de la pobreza, según el Banco Mundial. Además de los altos índices de desempleo (70%), en Haití se vive una grave escasez de alimentos y combustible. Las NNUU revelan que 4,4 millones de haitianos sufren de anemia y la mayoría no tiene acceso a agua potable y saneamiento.
El pueblo haitiano está sufriendo las consecuencias de la inestabilidad y la inseguridad que han generado las pandillas y que obliga a sus ciudadanos a buscar otras alternativas para sobrevivir, aumentando de forma significativa la presión migratoria principalmente sobre República Dominicana y en los países vecinos.
El gobierno de la RD dijo que su pais tiene el deber de pronunciar, como en anteriores ocasiones, sobre el deber de la Comunidad Internacional de remarcar la dramática situación de Haití.
Durante el último siglo, la población de Haití ha sufrido varias dictaduras, la más larga en manos de la familia Duvalier, que gobernó con mano de hierro entre 1957 y 1986. Desde entonces ha habido diferentes gobiernos que no han conseguido aportar la estabilidad necesaria para que el país pueda recuperarse de los desastres naturales,
En Haití, dos quintas partes de la población dependen de la agricultura de subsistencia y, por lo tanto, son muy vulnerables a los continuos desastres naturales que azotan la isla. Además de los dos terremotos de 2010 y 2021, Haití sufrió los efectos del huracán Matthew en 2016 y del huracán Laura en 2020.
El país estuvo bajo dominio español hasta 1697, cuando pasó a manos francesas. Más tarde se inició un movimiento independentista, conocido como la Revolución Haitiana, liderado por los descendientes de los esclavos negros que llegaron a la isla en los barcos de los colonizadores europeos.
Haití ha tenido más de 20 gobiernos en 35 años y es uno de los países más inseguros del mundo, con numerosas bandas armadas en las calles. En los últimos años fueron asesinadas 150 personas y otras 200 fueron secuestradas en los entornos de Puerto Príncipe, informa del Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos.
Esta situación ha sido agravada por el magnicidio del presidente Jovenel Moïse. Su mandato estuvo marcado por la crisis económica, la corrupción y las protestas, pero aun así Moïse pretendía alargar su mandato un año más de lo establecido por la constitución. Su muerte se produjo a dos meses de las elecciones presidenciales.
República Dominicana no puede cargar sola con los problemas de Haití. De hecho ya está haciendo mucho más de lo que puede. La situación del vecino país ha desbordado los límites de un problema migratorio; es, para los dominicanos, un tema de seguridad nacional, por lo que haremos lo necesario, como haría todo país soberano ante una amenaza similar, para asegurar adecuadamente su frontera.
A la República Dominicana, remarco su presidente: “…Nos ha costado mucho esfuerzo y sacrificio conquistar la libertad de la que hoy goza y que garantiza a sus ciudadanos y ciudadanas el disfrute pleno de sus derechos, la igualdad de todos ante la ley y la potestad de exigir a sus gobernantes transparencia y rendición de cuentas”.
“Hoy no hay impunidad en República Dominicana, hemos nombrado un Ministerio Público independiente, y hemos promovido la designación de profesionales autónomos en organismos neurálgicos, como: la Cámara de Cuentas, el Tribunal Constitucional, el Tribunal Superior Electoral y la Defensoría del Pueblo. Los controles establecidos garantizan que las diversas formas de corrupción hayan disminuido significativamente en una sociedad en la cual, como la nuestra, existía una “Cultura Generalizada de Corrupción”
Además, ha apoyado las propuestas surgidas en el seno del Congreso Nacional para que este poder constitucional apruebe una Ley de Extinción de Dominio, con la que "esperamos proteger adecuadamente el patrimonio público de los dominicanos y dominicanas”..
RP lucha por un Estado inclusivo, que apuesta por el progreso y con igualdad de oportunidades para todos y todas. Este fue el espíritu que guió durante lo peor de la pandemia del Covid-19. RD fue uno de los que demostró el ejemplo de buena gestión de la pandemia, que ha sido reconocido recientemente por la Organización Mundial de la Salud.
Para mitigar los efectos negativos de la pandemia, se aumentó el acceso al crédito para las actividades productivas, se expandieron los programas sociales para los más vulnerables, incluyendo políticas laborales, así como el apoyo al transporte y a la seguridad alimentaria de la población.
Todo esto permitió que en 2021 el PIB creciera un 12,3% con relación al 2020. La recuperación de los sectores productivos en 2022, ubica como una de las tres economías de mayor crecimiento y resiliencia de América Latina, segun el FMI, Forbes y Moody’s.
La RD ha impulsado la Alianza para el Desarrollo en Democracia junto a los gobiernos de Costa Rica y Panamá para promover la recuperación de sus economías en el marco de la defensa de los valores democráticos, las sociedades abiertas, los derechos humanos y el multilateralismo.
LA PALABRA DE EEUU
El Presidente Biden, la Vicepresidente Harris, los países hermanos miembros del Caricom y ha tenido un encuentro muy sincero y productivo. En esta reunión, donde el Presidente Biden y la Vicepresidente Harris fueron muy receptivos y demostraron su empatía con la región, se acordó establecer comisiones conjuntas, que de manera urgente trabajen en recomendaciones que empiecen a ser aplicadas de inmediato.
Un segundo tema es la seguridad. Los extraordinarios golpes al narcotráfico de RD han generado una reacción de otros tipos de delincuencia. La colaboración en la lucha contra el narcotráfico no solo debe ser para detener el flujo de drogas hacia el norte sino también para ayudar en la seguridad de las naciones, afectadas por las organizaciones criminales.
La Cumbre de las Américas reúne a los líderes de los países de América del Norte, América del Sur, América Central y el Caribe. La Cumbre, y sus foros promueven la cooperación hacia un crecimiento económico y una prosperidad inclusiva en toda la región, basada en nuestro respeto común por la democracia, las libertades fundamentales, la dignidad del trabajo y la libre empresa.
Historia de la Cumbre. La de 1994 fue la primera cumbre hemisférica desde 1967, cuando Uruguay acogió a la mayoría de los líderes de la región, pero no incluyó a Canadá ni gran parte del Caribe. Las cumbres periódicas posteriores han tenido lugar en Santiago de Chile (1998), Ciudad de Quebec, Canadá (2001); Mar del Plata, Argentina (2005); Puerto España, Trinidad y Tobago (2009);. Cartagena, Colombia (2012); Ciudad de Panamá, Panamá (2015) y Lima, Perú (2018). Se celebraron cumbres especiales en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia (1996) y Monterrey en Nuevo León, México (2004)