Papel de Arbol

martes, 6 de octubre de 2020

ATRAPADOS SIN SALIDA. Presos y exiliados amenazados por la muerte.



ATRAPADOS SIN SALIDA: PRESOS Y EXILIADOS AMENAZADOS POR LA MUERTE
TIME. Jorge Zavaleta Alegre.Urgente: Reducir la sobrepoblación carcelaria. La insalubridad es caldo de cultivo para propagar el virus dentro y fuera de las prisiones. Human Eights Watch, advierte que estas son las condiciones perfectas para que se produzcan brotes del Covid-19.

Y la quiebra de la Salud Mental es otra amenaza tan grave  que pasa inadvertida. Pues el cine una fuente valiosa para comprender nuestra cruda  realidad: 

Randle McMurphy, un hombre condenado por agresión y un espíritu libre que vive a contracorriente, está recluido en un hospital psiquiátrico. La disciplina inflexible del centro acentúa su contagiosa tendencia al desorden, que acabará desatando una guerra entre los pacientes y el personal de la clínica, con la fría y severa enfermera Ratched a la cabeza "Alguien voló sobre el nido del cuco es una de las películas más destacadas de esa época tan rica en materia cinematográfica como lo fueron los años 70; protagonizada por Jack Nicholson y dirigida por el recientemente fallecido Milos Forman. Es una de esas películas que a pesar del tiempo que ha pasado, se vuelven atemporales porque las posibles interpretaciones y apreciaciones se resignifican una y otra vez, al mismo tiempo que su trama encaja a la perfección con la época. . actual, a pesar de no pertenecer a ella.

Volvamos  marzo de 2020. Hubo amotinamientos en centros de varios países latinoamericanos. Cientos lograron fugarse, hubo decenas de heridos y al menos 40 reclusos murieron en esas revueltas en Colombia, Venezuela, Argentina, Perú, y Brasil.

Los gobiernos latinoamericanos deberían tomar medidas urgentes para prevenir un desastre de salud causado por un brote de COVID-19 dentro de las cárceles. La medida preventiva más importante es reducir el hacinamiento en las cárceles y centros de detención juvenil.

El Subcomité de la ONU para la Prevención de la Tortura (SPT) instó a los gobiernos a “reducir el número de personas en las prisiones y otros grupos de detenidos siempre que sea posible” . Esto debería incluir liberar a las personas que no tendrían que estar bajo custodia, como aquellas que no han sido acusadas formalmente, que fueron detenidas arbitrariamente o las detenidas por actos que no deberían estar tipificados como crímenes.

Los gobiernos de América Latina y el Caribe deberían considerar alternativas a la prisión para ciertas categorías de detenidos que no amenazan la seguridad pública. Para cada una de estas categorías, las autoridades deberían determinar si es necesario el uso de tobilleras electrónicas, arresto domiciliario u otras medidas.

Las autoridades tienen la responsabilidad de proteger y ofrecer cuidados médicos a los reclusos que no sean liberados. Es importante incluir, entre otras cosas, asegurar el acceso al agua potable; brindar productos de higiene e información sobre la enfermedad a los reclusos; desinfectar de manera completa y periódica las celdas en comisarías, juzgados, cárceles y prisiones...

Todos los planes que se adopten deberían contemplar la atención de necesidades específicas de las mujeres presas, que tienen necesidades de salud particulares y cuyos intereses suelen relegarse dentro de los sistemas penitenciarios.

Las autoridades también deberían tomar en cuenta el impacto que el aislamiento podría tener en la salud mental de los reclusos.

Algunas autoridades de la región han tomado medidas positivas. Por ejemplo, los gobiernos de Chile y Argentina, y el sistema de justicia de Brasil han adoptado medidas para permitir el arresto domiciliario u otras alternativas al encarcelamiento para ciertas categorías de reclusos.

Sobrepoblación carcelaria en América Latina y el Caribe. Tres de los cinco países con tasas más altas de sobrepoblación carcelaria del mundo están en América. Los establecimientos de detención en Haití tienen un nivel de ocupación de cerca del 450 %. Les siguen los de Bolivia y Guatemala, donde la tasa es de cerca del 360 %, según el Institute for Crime and Justice Policy Research.

Un factor fundamental que agudiza la sobrepoblación es el alto número de personas en prisión preventiva en muchos países. Por ejemplo, en Paraguay, más del 77 % de todas las personas encarceladas está a la espera de un juicio, conforme indican datos recabados por el Institute for Crime and Justice Policy Research. En Haití, esta cifra es del 75 %; en Bolivia, del 70 %; y en Venezuela, del 63 %.

Los espacios atestados, la falta de ventilación suficiente y la atención de salud inadecuada facilitan la proliferación de enfermedades respiratorias en las cárceles. En las prisiones de Brasil, por ejemplo, hay 1.400 casos de tuberculosis por cada 100.000 personas detenidas, en comparación con 40 entre la población general, según la información más reciente. 


En Chile, el gobierno anuncio  un proyecto de ley al Congreso para conceder el arresto domiciliario a internos de edad avanzada que no hayan sido condenados por delitos graves, y ha creado un comité de emergencia encargado de adoptar medidas preventivas contra la pandemia en las cárceles. Las cárceles de Chile, que están a capacidad plena, albergan a casi 43.000 detenidos, de los cuales el 33 % está a la espera de un juicio, según datos del Institute for Crime and Justice Policy Research.

En Argentina, el Servicio Penitenciario Federal está elaborando una lista de internos expuestos a un mayor riesgo de salud, a fin de que la justicia evalúe la posibilidad de dictar para ellos medidas alternativas a la detención.  Los centros de detención de Argentina tienen una ocupación del 122 % y albergan a 103.000 personas, el 46 % en prisión preventiva.

En Brasil hay 773.000 personas encarceladas en establecimientos ocupados al 168 % de su capacidad, y el 33 % está a la espera de un juicio. El Consejo Nacional de Justicia de Brasil recomendó que se dispongan alternativas a la detención en beneficio de niños y niñas. El Tribunal de Justicia del estado de São Paulo ordenó que todos los niños y niñas que estén detenidos por delitos no violentos sean liberados y que el personal les dé seguimiento a distancia mientras estén fuera de los centros de detención.

La pandemia aumenta la xenofobia y el racismo contra los asiáticos en todo el mundo. Segun ACNUR, la pandemia actual es una grave amenaza para la educación de las personas refugiadas. La mitad de los niños y niñas refugiados en el mundo no están escolarizados.

Sin un mayor apoyo, el incremento sostenido de matriculación en escuelas, universidades y estudios técnicos y de formación profesional, que se ha ido ganando con gran esfuerzo, podría verse revertido, en algunos casos de forma permanente, poniendo en peligro los esfuerzos para alcanzar de la agenda de Desarrollo Sostenible.

“Garantizar una educación de calidad hoy significa menos pobreza y sufrimiento mañana. A menos que cada uno ponga de su parte, generaciones de niños y niñas, millones de menores en algunas de las regiones más pobres del mundo, tendrán que hacer frente a un futuro sombrío. Pero si trabajamos en equipo, unidos como si fuéramos uno solo, podemos darles la oportunidad que se merecen de tener un futuro digno. No la perdamos”.

Los datos del informe de 2019 se basan en las estadísticas de doce países que acogen a más de la mitad de los niños y niñas refugiados. Apela a los gobiernos, al sector privado, a la sociedad civil y a otros actores clave a unir fuerzas para encontrar soluciones que refuercen los sistemas educativos nacionales y se vinculen con itinerarios educativos certificados, y para asegurar y salvaguardar una financiación sostenible para la educación. 

El informe de ACNUR, “Olvidados: la educación de los refugiados en crisis”, publicado en 2017, pedía que la educación fuera considerada un elemento fundamental en la respuesta a las crisis de refugiados. El tercero, “Invertir la tendencia”, publicado en 2018, destacaba que, a finales de 2017, cuatro millones de niños y niñas refugiados no asistían a la escuela. El cuarto informe, “Reforzando la educación de los refugiados en tiempos de crisis”, ponía de manifiesto la enorme brecha entre la educación secundaria y superior.

Para concluir, unos parrafos mas sobre la Salud Mental: "Alguien voló sobre el nido del cuco", también conocida como "Atrapados sin salida", es una de las películas más destacadas de esa época tan rica en materia cinematográfica como lo fueron los años 70; protagonizada por Jack Nicholson y dirigida por el recientemente fallecido Milos Forman.

A diferencia de lo que suele suceder con aquellos títulos que hoy consideramos "clásicos" o "de culto", cuya valoración se construye muchos años después de su estreno, en el caso de esta película de 1975, la favorable acogida del público y la aceptación de las críticas se vieron reflejadas en el éxito inmediato de taquilla. "Alguien voló sobre el nido del cuco" es una de esas películas que a pesar del tiempo que ha pasado, se vuelven atemporales porque las posibles interpretaciones y apreciaciones se resignifican una y otra vez, al mismo tiempo que su trama encaja a la perfección con la época. . actual, a pesar de no pertenecer a ella, escribieron  Giu Capiello y Jorge Zavaleta Balarezo,  conocedores del cine.

"Alguien voló sobre el nido del cuco" representa un asilo parecido a una prisión, con grandes muros, alambre de púas y seguridad. De hecho, la película fue filmada en las instalaciones de una verdadera institución mental, ubicada en la ciudad de Oregon.