Ahora todo es rutina. ¿Somos realmente libres?  La  tierra, el agua, la naturaleza ya no son nuestras son de las grandes multinacionales, de las grandes sociedades y oligopolios, que todo lo manipulan a través de algunos mass media afines a ellos que les favorecen porque tienen intereses creados. Ellos nos hacen ver lo que les interesa, es la rutina diaria de los manipuladores a sueldo para tratar de convencernos que “todo es rutina” y que hay que aceptar la vida como viene. No te puedes rebelar. Si lo haces, te aplican la ley creada para ellos, no para el hombre ni para la Naturaleza.
En muchos árboles ya no hay fruta, y agua limpia en algunos ríos. “Coge algo de lo que da el planeta y vas a la cárcel”. Seguimos las reglas que nos imponen todos los  días, y si no las aceptas el poder judicial te aplica su código; descubrimos el mundo a través de sus libros, de sus escritos; descubrimos el mundo, la tierra, el aire, el agua, el fuego; pasamos años repitiendo, somos educados por el sistema, trabajamos tanto que no nos queda tiempo para disfrutar de la vida, y cuando la nuestra se acabe, nuestros hijos tomaran el relevo; “solo se vive na vez”, como dice la canción, pero somos más que combustible.
Nos han imbuido que tenemos que construir sus casas,  y que tenemos, como buenos “patriotas”, que combatir en sus guerras; no es el dinero sino el poder, ellos nos dieron el dinero y nosotros les entregamos ¿la vida? “Donde había naturaleza hoy hay fábricas contaminantes; donde había agua para beber hoy hay contaminantes; donde antes había animales corriendo en libertad, hoy hay granjas” que alimentas a muchos animales con hormonas y antibióticos para que aumente el peso pero no la calidad. Nos hacen ser COMO UNA PLAGA, que todo lo destruye.
“¿Qué pasará cuando destruyamos la vida del planeta? Parece que todo se puede comprar y vender como si fuera nuestro, ¿Qué pasará cuando hayamos contaminado el planeta?” Las respuestas son inevitables y contundentes: La contaminación es una de las causas más importantes del la proliferación del cáncer, de las enfermedades cardiovasculares, que matan miles de personas todos los años; “somos lo que comemos”, “nos alimentan con química tóxica”.
“Ahora seguimos creyéndonos el centro del universo, el centro del planeta. Y nos llamamos civilizados. Hace 100 años las mujeres no podían votar; sin embargo, tenemos ordenadores, industrias que según algunos es sinónimo de inteligentes. Nos da miedo que estemos solos y que seamos parte del algo más grande”.
¿Matamos porque podemos?,  o por qué nos ordenan matar?. La muerte nos rodea, vivimos en un mundo a punto de colapsar, rodeados armas por todas partes, fabricándolas par a matar, para venderlas a terceros países para que se maten entre ellos. ES UNA VERGÜENZA. Estamos destruyendo el mundo; sin embargo, la gente más feliz es la que menos tiene. “¿Somos auténticamente felices con nuestros smasphones, ordenadores, automóviles, nuestras casas?”; nos hemos  desconectado de la realidad, ya no nos importa casi nada, eso sí que nos den dinero para seguir viviendo conectados a una pantalla, sea del ordenador, del móvil y de la televisión,  o a una pantalla de un plasma como algunos mandatarios se comunican con sus súbditos.
Las elecciones de nuestros representantes “son dos caras de la misma moneda”, elegimos a uno y todo sigue igual, no trabajan para nosotros sino para los que los mantienen en el poder: Multinacionales, grandes sociedades, bancos, oligopolios. No trabajan para nosotros. Somos un número, no importamos nada. NECESITAMOS SER LIBRES y sentirnos LIBRES. No esperes el “cambio”, el“cambio eres tú”.
La raza humana subsistió por trabajar en equipo. Somos producto de nuestros ancestros, pero ética y moral no nos parecemos a ellos. “No se trata de salvar el planeta, éste vive solo desde hace miles de millones de años; la Tierra seguirá con o sin nosotros, porque nosotros sólo somos un instante en la vida planetaria”: Hemos vivido una época entera dedicados a la informática, pero Internet nos permite conectar con la gente  para bien o para mal.
Somos los rostros de los que estuvieron antes en la Tierra. Es tu turno, seguir el destino o escribir nuestra historia. Es nuestra historia. Pero podemos cambiar la historia. Tenemos que transformarnos en seres vivientes que ayuden a la Naturaleza a subsistir; no podemos esquilmar la selva virgen, el pulmón del Planeta.
Estamos conectados con Internet con  mucha gente que no nos aporta nada, otros, en cambio si nos aportan; a todos les importa el progreso de si mismo; el de al lado le es indiferente; no hay solidaridad: dos tercios de la humanidad vive en la penuria, pero eso no nos importa; sólo nos  importamos a nosotros mismos, el que venga por detrás que arree, que se las arregle el sólo.
Terminamos con una cita de Beltrolt Brecht:

                    No.
No aceptes lo habitual como cosa natural.
Porque en tiempos de desorden,
de confusión organizada,
de
 humanidad deshumanizada,
nada debe parecer natural.