La actual crisis política y la crisis
económica que se asoma obligan a la sociedad  a actuar con rapidez, consecuencia y flexibilidad.
 La cuestión es la movilización de los sectores populares, los trabajadores, jóvenes y, al mismo tiempo,  ganar a
los sectores sensatos de la burguesía emergente y la burguesía tradicional. 
Un
objetivo sensato es la unión de los movimientos  en un solo bloque electoral  por un gobierno progresista, democrático y
patriótico e inicie una nueva etapa de desarrollo, basada en una nueva
industrialización, una mayor democracia y el respeto irrestricto de los
derechos de los trabajadores y de todos los pueblos.  
Estos conceptos  promueven diversos sectores  juveniles, laborales, los  docentes más lúcidos  de las principales  universidades. 
 
