Papel de Arbol

martes, 4 de febrero de 2014

AMÉRICA LATINA . EL QUIJOTE Y LA EDUCACION INTERCULTURAL

Jorge Zavaleta Alegre, Cambio 16, Madrid
"¡Anchatan munankuykin sunquchallay!", es un equivalente al inglés "I love you" o a la fría frase castellana "te quiero mucho". El equivalente de la frase es, en cambio, más musical y más tierno. Algo así como "¡yo te quiero mucho, corazoncito mío!", Demetrio Tupac Yupanqui.
La construcción de un mundo mejor en América Latina puede encontrarse en la educación intercultural bilingüe, como una certera invitación  a la paz y un camino  a la convivencia.
Abundan las propuestas  de políticas educativas en contextos  multilingües, pluriculturales y multiétnicos. Sin embargo, la aplicación de los distintos  programas, encuentra obstáculos infundados, irracionales. No obstante, hay antecedentes históricos  que marcan la presencia de El Quijote de la Mancha, cabalgando en los  Andes.

La traducción de la obra de Cervantes al idioma andino opera como testimonio de la resistencia de una lengua nativa, como el quechua, que actualmente hablan 20 millones de personas a lo largo de toda Sudamérica, frente a la imposición del español como lengua oficial en América. Mucho  más significativo es el hecho de que la edición cuenta con ilustraciones propias del pueblo Sarhua, conocidas como "tablas", que recrean el trabajo comunitario, y enfatiza la solidaridad colectiva, opina Luis Millones en su trabajo auto-etnográfico Amor Brujo (1989)
La Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia  denuncia:   «La escuela que hemos conocido antes nos hizo callar, nunca permitió expresarnos ni comunicarnos, teníamos miedo de equivocarnos, nos castigó tanto moral como físicamente y nunca nos trató con afecto y cariño...»
La revista  Iberoamericana comenta: «El sistema de educación del que hemos sido siervos en tantos años nos ha hecho frágiles y seriamente vulnerables a los distintos riesgos y provocaciones. Por eso el Consejo Regional Indígena formula que la educación  sea propia»
En los territorios indígenas en  los cuales las lenguas autóctonas son idiomas de uso predominante, la persistencia de lo indígena es innegable. Las constituciones de por lo menos once países - Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua, Paraguay, Perú y Venezuela -  reconocen y aceptan su pluri o multiculturalidad y algunos, como en el caso ecuatoriano, que trasluce  el carácter «multinacional» del país.
El multilingüismo latinoamericano está relacionado con la presencia de cerca de medio millar de idiomas indígenas u originarios. Con la existencia de lenguas criollas y de diversas lenguas extranjeras, producto de las migraciones africana, europea y asiática.
Si nos atenemos sólo a las lenguas amerindias, en la región se hablan entre 400 y 450 idiomas y un número mucho mayor de dialectos o variantes de aquellos. En Colombia, país en el cual la población indígena constituye sólo un 1,7% de la población total, se hablan entre 64 y 68 idiomas diferentes.  En Bolivia y Guatemala, con una proporción de población indígena que bordea el 60%, están ante 32 y 23 idiomas, respectivamente. Brasil tendría más de 170 lenguas, cuando su población indígena no superaría los trescientos mil habitantes o el 1% de la población total.
En Perú unos siete millones de personas hablan quechua y unas 400 mil personas  las  41 lenguas habladas en la Amazonía.
A excepción del Uruguay y de la subregión caribeña, hay presencia indígena desde el sur del Río Bravo o Grande hasta la Tierra del Fuego. Un poco más del 10% de la población total.
EL QUIJOTE DE TUPAC YUPANQUI

Los  lingüistas latinoamericanos cumplen una loable, compleja y controversial labor para promover las lenguas nativas, cual Torre de Babel.
En este grupo  destaca actualmente  Demetrio Túpac Yupanqui -  DTY traductor del Quijote en quechua.  Su trabajo académico permite que la obra de Miguel de Cervantes Saavedra  se pueda leer en el idioma de los incas.  La traducción y adaptación de Tupac Yupanqui  lleva el titulo: “Yachay sapa wiraqucha dun Qvixote Manchamantan”.
El Copyright ha sido asignado al peruano  Miguel de la Quadra-Salcedo y los derechos de esa primera edición han sido cedidos a la Empresa Editora El Comercio, conglomerado periodístico, a quien los familiares y amigos del notable  traductor peruano exigen un mayor reconocimiento al inmenso trabajo que le ha significado al equipo de la Academia “Yachay Wasi”, más aún cuando se anuncia una nueva edición. La primera del 2005 fue una presentación de lujo, para  un mercado cautivo.
DTY es reconocido en diversos círculos de España  que remarcan el valor del quechua, como el instrumento ideal para establecer el diálogo y evitar las rebeliones populares. Así se le escucha  en sus concurridas clases con  grupos de brasileros, suecos, americanos o compatriotas.
Cusqueño de nacimiento, padre de 11 hijos, lleva el mismo nombre de su antecesor, el Inca Túpac Yupanqui.  Desde  joven recibió exclusiva educación en un seminario, preparándose para ser sacerdote. Aprendió  latín y  música, y profundizó sus conocimientos  en la gramática de la lengua que aprendió de su madre,  en su hogar de San Jerónimo. Logró llevar el quechua a las aulas de la universidad  de Cornell.
DTY, Cuzco, 1924, periodista, estudió filosofía  y  derecho en las principales universidades peruanas. En el 2008, su curso de quechua fue traducido al ruso, por A. Skromnitsky.
En 1968, el gobierno del general Velasco,  en una época en que gran parte de América del Sur era gobernada por dictadores de extrema derecha, se promovió la igualdad de derechos para los grupos indígenas y decretó que el quechua debería contar con una igualdad de base jurídica igual al español. DTY,  en 1975, recibió el encargo del gobierno  para traducir el himno nacional de Perú al quechua,  e impartió clases a militares, funcionarios públicos y algunos extranjeros  interesados en los campesinos indígenas.
El gobierno de Alejandro Toledo, a través de la primera dama  Eliane Karpe, antropóloga de profesión, trató de impulsar  la enseñanza del quechua, pero le resultó difícil dar pasos firmes por el profundo racismo en el Perú, empezando por la tierra natal de Cabana, del presidente,  donde en tiempos pasados, era penalizado el hablar la lengua de los andes: “La autoridad eclesiástica podría arrancarle hasta  50 cabellos por cada palabra expresada”, señalan   sacerdotes y pobladores de los pueblos de la Cordillera Blanca donde habitó el gamonalismo y abuso con el campesino. 
"La traducción de 'El Quijote' es importante no como una curiosidad, sino como un signo de lo que se debe hacer en una escala más amplia en las repúblicas andinas si los quechua hablantes fueran incluidos plenamente en sus respectivas comunidades nacionales", dice Bruce Mannheim, un antropólogo de la Universidad de Michigan.
LA RUTA DEL QUETZAL
Es el nombre de  proyecto patrocinado por el Rey de España, en el que participan más de 300 jóvenes de 50 países, a través de un viaje cultural de un mes y medio. Demetrio Túpac Yupanqui es un invitado por su dedicación  a la difusión del Quechua.
Para  DTY, el Quechua es el idioma más importante de América, hablado por cerca de 30 millones de personas, lengua que tiene la cualidad de ser sencilla y de gran precisión lingüística. Está considerada, a nivel de estudios avanzados, como el medio de expresión para exponer los elementos más sutiles del pensamiento humano.
Un antecedente editorial de Don Quijote en quechua santiagueño, lo encontramos en fragmentos que fue presentado durante el V Festival Cervantino, en Buenos Aire, 2005, por  Javier Merás, quien recopila fragmentos cortos tipo haikus y pensamientos del propio Cervantes extraídos  de El Quijote.

La traducción de  DTY fue lograda en un par de años de intenso trabajo, que fue el gran atractivo de la Feria del Libro de Guadalajara.  La primera parte de Don Quijote, consta de 514 pp y está ilustrado con dibujos de campesinos y paisajes de pueblos andinos.
EL QUIJOTE  EN EL VOLCAN SARA SARA
Introducción de Don Quijote:
"En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no/
quiero acordarme, no hace mucho tiempo que/
vive un idalgo de los de lanza en astillero,/
adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor".
--
La versión quechua de estas líneas, dice: "Huh k'iti,/
la Mancha llahta suyupin, mana yuyarina markapin,/
yaqa kay watakuna kama, huh axllasqa wiraqucha,/
t'uhsinantin 'hidalgo' inka yawar, ch'aki rocin kawalluchayuh,/
phawakachah 
Los pueblos ayacuchanos, ubicados al pie del volcán Sara Sara, fueron visitados en las últimas elecciones generales del Perú del 2012. Si en el siglo XVI, en estas tierras se escenificó el Quijote de la Mancha, por primera vez en América; hoy adquieren notoriedad porque Oyolo, remoto distrito, a 18 horas de Lima, es la cuna de los Humala Tasso. El ex comandante  Ollanta Moisés Humala, es elegido  presidente de la República 2011-2016.
 Ayacucho - el rincón de muertos, en quechua - es una región emblemática de la historia sudamericana, porque en ella se dio en 1824 la última batalla por la independencia de la corona española. En tiempos electorales salieron a luz las bondades y limitaciones de la provincia de Páucar de Sara Sara, al pie de un volcán, con su capital La Pauza, la ciudad Cervantina de América, y Oyolo, uno de los distritos más rebeldes.
La reconciliación llegó a Oyolo, “zona roja” en los años noventa, para inventariar la barbarie de Sendero Luminoso y la represión militar. Antes, en 1914 - 1930, los campesinos se levantaron contra los “mistis” y gamonales, en épocas de sequía y fríaje.
La Pauza, cuna de músicos y artesanos, vivió una fugaz fama literaria, que los maestros de escuela suelen repetir, como una quimera de oro. En aquella ciudad serrana, ocurrió algo histórico a partir de un 19 de octubre de 1607, por espacio de dos meses. Ese día, El Quijote de don Miguel de Cervantes, salió del libro para viajar a los andes americanos.
A esa localidad había llegado el recién nombrado virrey Marqués de Montesclaros. Pues, el corregidor de Parinacochas, Pedro de Salamanca, en homenaje a la autoridad, propició la escenificación de la obra cumbre de la literatura castellana. Se trataba de la segunda puesta en escena en el mundo, después de Valladolid, en junio de 1605. A la plaza de La Pauza acudieron los españoles radicados en esa rica zona de oro y plata.
Durante el Virreinato, el eje del comercio mundial fluía entre España, Boston, Lima, Huamanga (capital de Ayacucho), Potosí y Buenos Aires. Pues con el tiempo, la cruz y la espada instauraron fiestas y costumbres eternas.
EL QUECHUA Y LA LEY
DTY explica que promover el quechua no es cuestión de leyes. Ninguna lengua se expande mediante una ley, y menos en un país como el Perú, en que no hay ni textos ni suficientes profesores de quechua. A las lenguas le dan vida los pueblos y no las leyes; lo lamentable es que el pueblo quechua no cuenta con los medios modernos de la comunicación.
A lo largo del siglo XX el porcentaje de quechua hablantes en el Perú no ha dejado de reducirse, y en el último censo de 2007 solo el 13,2% de la población confesaba tener el quechua como primera lengua de comunicación.
Respecto al  quechua, diversos escritores, desde diferentes  vertientes han opinado sobre  las bondades de la integración a través de nuestras lenguas nativas. Son múltiples esos textos: de José María Arguedas, Mario Vargas Llosa y  Carlos  Eduardo  Zavaleta, entre otros. CEZ, quien solía retornar a la tierra de su infancia (Callejón de Huaylas), solía decir:  “Mi vida me permitió conocer el Perú y me permitió conocerme a mí mismo. Me acuerdo nítidamente de las escenas serranas que están en mis cuentos, el paisaje, la gente pobre, pero resistente. Los ancashinos han pasado tremendos aluviones, peligros, terremotos salvajes. Son indestructibles. El quechua es una lengua  muy tierna, para hablar de amor” 

CARTA DE DEMETRIO TUPAC YUPANQUI A SU HIJA MERCEDES 



Lima, 09 de febrero del 2014

Sra. Mercedes Túpac Yupanqui
Ciudad.

Estimada hija:
He dado lectura al hermoso artículo del periodista Jorge Zavaleta Alegre. Es una información completa y clara sobre la exigencia de los idiomas nativos dentro del desarrollo nacional y cultural de los pueblos.
En mi larga vida de periodista, pocas veces he visto una información que resume claramente la situación en que se encuentran los idiomas nativos.

En lo que se refiere a mi persona, agradezco mucho la precisión con que enfoca mi dedicación a la enseñanza del quechua y el propósito que me anima en su realización.
Si hay que corregir algo es apenas una ‘n’ que hay que agregar a la mención quechua: “Anchatan munakuykin, sunquchalláy”.

Si fuera posible, sería muy grato que mencionara que nuestra difusión del quechua comenzó en Estados Unidos, en Cornell University de New York. Se continuó en Bolivia, en las universidades de La Paz y Cochabamba. Luego, fuimos invitados a ofrecer una conferencia a los neuropsiquiatras de las Organización Mundial de la Salud en Buenos Aires, a cargo de Washington University. Lo seguimos con la invitación que nos hizo el grupo cervantino mundial a su reunión anual de Guanajuato, en México.
Quizá somos uno de los pocos peruanos que ha ofrecido una conferencia sobre el quechua en las oficinas de las Naciones Unidas, en Ginebra, y en diferentes universidades de Holanda, norte italiano y París. Al igual que en Madrid, Toledo y Segovia, en este último lugar en su hermosos monasterio de benedictinos del Siglo IV.

También se podría mencionar que estoy terminando de corregir la segunda parte de la traducción de Don Quijote de La Mancha, que será publicado muy próximamente.  Además, tenemos en preparación una gramática quechua sencilla, con lenguaje periodístico; una traducción del drama Ollantáy, considerado por el doctor Raúl Porras Barrenechea como una obra igual a los Comentarios Reales de los Incas del Inca Garcilazo de la Vega o a Las Tradiciones Peruanas de Ricardo Palma. Asimismo, tengo en preparación un diccionario enciclopédico del mundo quechua.   



Hijita, agradécele muy de veras al colega Zavaleta por la generosidad con que escribe el hermoso articulo.
Un abrazo           
Demetrio