Jorge Zavaleta Alegre. Cambio16-Madrid.-
Fotos Verónica Morales y Archivo.-
El arte no siempre está cerca del político tradicional.
Alguien como Dostoievski preguntó  ¿Nos
salvará la belleza?. Y en la búsqueda de la respuesta  ha surgido 
una más profunda ¿Qué belleza nos salvará?
Lenín Moreno Garcés, vicepresidente del Ecuador,  al presentar Sueños,  un  esfuerzo editorial multidisciplinario de la
Fundación Triángulo: artes escénicas y discapacidad,  nos lleva a pensar que   el sueño común  del hombre es la felicidad. “Sueños es
entonces una ruta para conseguirla”.  
El libro busca mostrar 
las capacidades de los discapacitados,  significa  que son distintos los que enriquecen la
diversidad, los que tienen mucho que decir, son una identidad tanto o más
respetable que cualquier otra.
Mediante las artes escénicas se  desarrolla talentos actorales, posibilidades
de comunicación entre ellos  que de otra
manera no se habrían conocido.  
Sueños, tampoco es una obra de discapacidad sino de
inclusión, advierte Isabel Núñez, coordinadora general del proyecto, al
destacar la participación de cien personas con discapacidades mentales, como el
síndrome de Down y autismo.
Ecuador promueve un cambio radical, al menos, respecto
a la conciencia política, económica y social en lo relevante a personas con
discapacidad y de las personas realmente vulnerables. A través del Arte,  puede abrir las puertas a un mundo mejor. “Ahogar
el mal en abundancia de bien, mostrar las capacidades  de la discapacidad, lo completo dentro lo
concebido como incompleto, la belleza y la verdad en lo que tradicional y
equivocadamente  nos han enseñado que es
feo, distante y ajeno”.
Con excelente fotografía y diseño, encontramos  200 pp. de una vida que tiene treinta años de
distancia y a la que le han sumado 
muchos corazones y voluntades infinitos con el favor del tiempo. Desde
el poder espiritual que posee el arte y en las otras disciplinas  se ha convertido en fortaleza como terapia de
relajación, evasión e inclusión social. La experiencia viva  de una obra de teatro, como la de una novela
o una composición musical, es una vía de sentimiento que fluye dentro de
nosotros.
“Los auténticos actores son esa raza indomable que
interpreta anhelos y fantasmas del inconsciente colectivo”, comenta Ana
Diosdado, escritora y actriz hispano-argentina, dentro de una bella lista  de frases de grandes autores como Gabriela
Mistral, Bernard Shaw, Benedetti y frases anónimas como:
“Tu sabes que los números son innumerables. Pero no te
preocupes, que yo seguiré creyendo que dos unos son once”.
Sueños es una confrontación de la lucha de una ciudad
convulsionada por los problemas cotidianos. Todo esto compartido de sueños y
pesadillas.  Tiene un final feliz, con un
amanecer distinto, con expectativas y esperanzas. Es una revelación de jóvenes
que han encontrado el amor durante los ensayos. “Yo buscaba a un hombre
perfecto, un hombre perfecto por dentro. Seguro 
que lo encontró.
Sueños es más que un libro impreso. Es un mensajero  con frutos que se multiplican. Ecuador desde
2010 desarrolla, un trabajo de inclusión social. Ha creado  una metodología de gestión y que se ha
enriquecido  con las experiencias en  los pueblos fronterizos, como Tumbes, en el
Perú.  
La integración cultural se extiende a los países de la
Cuenca Amazónica.  Un acuerdo binacional de
la comisión de  cultura Ecuador-Perú,
suscrito en Guayaquil el  14 de agosto de
2013, abre el camino para llevar adelante  programas sociales de  atención  a las personas  con discapacidad, empezando por la niñez y la
adolescencia  de la Cuenca del Napo. 
El Viceministerio
de Poblaciones Vulnerables  del Perú lidera
 una comisión multisectorial, la cual compromete
la participación de la Armada Nacional, 
con una flota de embarcaciones para unirse a la acción de los  gobiernos locales, regionales y comunidades nativas, que conforman El Oro de
la Aldea, una acuciosa investigación de 
Julio Rojas y Julio Kuroiwa, que plantea el radicalismo  de la ética, premisa para alcanzar el
desarrollo sostenible de nuestra sociedad.




 
