Madreselvas tardan varios años para florecer. Huaylas-Emmitsburg.
Jorge Zavaleta Alegre.-
Con información de July Zavaleta, para Sandra Negrón y Freddy Hurtado de Mendoza médicos cerca del combate contra coronavirus de la muerte.
Con información de July Zavaleta, para Sandra Negrón y Freddy Hurtado de Mendoza médicos cerca del combate contra coronavirus de la muerte.
En la Avenida Minerva 101, de Caraz, capital de la provincia de Huaylas, a 550 kms. al Norte de Lima, Perú, América del Sur, las familias disputaban, en fraternal vecindad, la tenencia del mejor jardín. Elena e Isaías, mis padres, tenían el encanto de coincidir en el cómo construir una casa segura, inclusive contra sismos y terremotos (Mayo 1970 -70 mil muertos), rodeada de flores, y huertos de granadillas, pacaes, tunas, melocotones, rocotos verdes, amarillos y rojos. Agua caliente con los rayos solares de un cielo siempre despejado, azul y muy azul. Y a media noche, la fragancia de madreselvas, se respiraba desde la cocina, hasta los dormitorios, sala y la colca o depósito de semillas de papa, trigo, frijo o cebada para asegurar que la pequeña chacra diera frutos para la siguiente cosecha, siempre celebrada con música y agradable yantar.
Pero, de este paisaje idílico, llegada la adolescencia, había que alejarse. La escuela, el colegio nunca enseñó a construir futuro en su propio suelo. Emigrar era un objetivo, pase lo que pase. Y esta conducta casi universalizada, no siempre conduce a construir el sueño de bienestar, que la literatura más antigua, los medios de comunicación y el libérrimo mercado han creado una quimera, una ilusión fantasma del modernismo.
Pues no es sorpresa que el ecosistema nos afirme: basta, basta, basta de este peregrinaje sin trascendencia. Este es un tema frecuente de conversación con mi familia más cercana como Virginia y Gustavo Stuart, conocedores de la economía doméstica y nacional y la música de David Flores, jurista y director de la Lira Huaylina. https://www.youtube.com/watch?v=WdVch4ljYAg
Pues no es sorpresa que el ecosistema nos afirme: basta, basta, basta de este peregrinaje sin trascendencia. Este es un tema frecuente de conversación con mi familia más cercana como Virginia y Gustavo Stuart, conocedores de la economía doméstica y nacional y la música de David Flores, jurista y director de la Lira Huaylina. https://www.youtube.com/watch?v=WdVch4ljYAg
Caminando lejos, siempre está presente ese universo de la infancia. Si no es un macetero, es el pequeño jardín que nos acompaña, espacio casi inexistente en los edificios cada vez más empinados, en donde los vecinos, requieren de una área donde poder sembrar una flor; y aquellos que llegaron llenos de esperanza, y que en cambio viven en las alturas de los cerros entre arena y piedras, sin agua, ni menos aún de encontrar trabajo digno, que justifique el abandono de sus pueblos. El trabajo comunitario va quedándose en el olvido.
El papa Francisco en su gira americana del 2016 estuvo en el Congreso de los EEUU y se ha convertido en el primer Sumo Pontífice que interviene ante la cámara norteamericana reunida en sesión conjunta.Y pidió construir puentes para unir a los pueblos. Estados Unidos, país multicultural de inmigrantes y personas procedentes de cientos de orígenes étnicos, se ha convertido en una población con mayor diversidad religiosa en el mundo. Pues la religión juega un papel importante en sus vidas.
En este Siglo XXI, las grandes urbes son invivibles. Las diferentes plagas invaden y los habitantes no saben, ni pueden abandonar el lugar que los cobija. La descentralización no es repetir el modelo centralista. Es imaginación, es participación social, es educación integral. Los colegios de arquitectos tienen muchos modelos que se exhiben en foros diversos, pero el negocio está en el cemento, suprimendo área para un árbol, quebrantando el ambiente que ocupa.
La Unión Internacional de Arquitectos (UIA), el Instituto de Arquitectos de Brasil (IAB) han acordado junto con la OMS, en medio de la pandemia de COVID-19, posponer el 27° Congreso Mundial de Arquitectos para julio de 2021.
La Unesco, presenta un estudio de Suely Maria Ribeiro Leal, contribución a un debate general de suma actualidad: ¿Es posible que el reciente auge de la gestión urbana participativa sea una solución que las sociedades de los países en desarrollo aportan hoy a los graves problemas urbanos, tras el fracaso de las políticas urbanas estatales y la malversación de las descentralizaciones representativas por la corrupción?
Numerosas publicaciones sobre el tema y sobre las perspectivas futuras citan como ejemplo a Brasil, sin disponer de estudios recientes y profundos. En ésta, la Sra. Leal nos ofrece un análisis muy pertinente e ilustrativo del caso de la ciudad de Recife. A partir de su restauración en el decenio de 1980, la democracia brasileña ha tratado de crear nuevos instrumentos de participación institucional en el plano del poder local. La ciudad de Recife ha sido adelantada de esta voluntad de implantar una gestión democrática.
La Sra. Leal nos muestra primero las causas y las modalidades de ese esquema original de desarrollo, que se aplica en el marco de un poder municipal simbolizado por la figura del alcalde y de una participación activa en los movimientos sociales. Un nuevo concepto de planificación urbana se hace patente a través de las experiencias de la gestión compartida. Urgen “nuevas formas democráticas”: El Ayuntamiento en los Barrios, del Presupuesto de Participación y de otros dispositivos institucionales de participación, antes de exponernos sus reflexiones más personales sobre esta “gobernanza urbana” aplicada en la ciudad de Recife de 1993 a 1996.
La autora nos advierte acerca de la relativa fragilidad de los resultados conseguidos, sobre la índole limitada y fragmentaria del control social del espacio urbano y la inexistencia de auténticas alianzas entre las elites económicas y las distintas clases sociales, aun cuando haya habido progresos significativos en cuanto a la institucionalización de dispositivos democráticos de gestión urbana.
Este análisis del caso de Recife permitirá al lector profundizar en muchos aspectos de los debates actuales sobre la gobernanza y contribuirá a matizar los modelos demasiado radicales, que oscilan entre un pesimismo sombrío y un optimismo utópico. Sin duda el camino que conduce a la gestión participativa será largo y estará sembrado de obstáculos, pero la Sra. Leal nos enseña que no es imposible recorrerlo, remarca Michel Rochefort Profesor emérito de la Universidad de París, al comentar las propuestas del futuro desarrollo de la civiización.
Estados Unidos, país multicultural de inmigrantes y personas procedentes de cientos de orígenes étnicos, se ha convertido en una población con mayor diversidad religiosa en el mundo. Pues en este país, que se disputa el liderazgo en el mundo, nos ofrece un referente urbano:
Emmitsburg, que forma parte de Cacoctín, cadena de los Alpes, en el presente siglo XXI es una pequeña ciudad, cerca del condado de Frederick, que bien puede ser calificada como la comunidad religosa más dinámica, donde conviven diversos grupos religiosos, manteniendo el respeto a la diferencia. Las fiestas católicas se festejan con solemnes misas y quema de fuegos artificiales, cuyas luces irrumpen un cielo iluminado por el sol más alla de las ocho de la noche, en el verano. Con 3,500 habitantes, es un referente de cómo el urbanismo puede prever la perversión ambiental de la creciente población y las limitaciones, cada vez más grandes, para gozar del derecho a la vida. Dispone de una Biblioteca pública con intenso servicio a domicilio, hospitales, bomberos, pocos centros comerciales, amplias avenidas y escaso tránsito, un model en plena multiplicación del desarrollo.
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Papel de Arbol- Lima - Emmitsburg. Maryland
Corresponsal de Diario16. Madrid. Elmeruriodigital.net. de España. Tandil de Buenos Aires y Panoramical de Milán-Bruselas.
papeldearbol@gmail.com
902 48 374
240 439 7509
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