En el documento de la Delegación del Gobierno Bolivariano "recuerdan
con orgullo que la FAO ha denominado “Hugo Chávez” a su programa de atención de los problemas de alimentación de los pueblos del mundo como una forma loable de reconocer los esfuerzos del Gobierno Revolucionario para combatir la miseria y la pobreza, estamos convencidos de que la organización popular y el Gobierno Revolucionario derrotarán el flagelo del desabastecimiento de alimentos y medicinas. Nosotros los reconocemos a Ustedes como una fuerza política, hemos asumido con hidalguía las victorias electorales y con dignidad y firmeza las derrotas. A continuación la versión completa del documento:
Construyamos un consenso de
vida y paz para la Patria
Desde los inicios del Gobierno de la Revolución Bolivariana en 1999, Gobierno
al que accedió nuestro Comandante Chávez por la vía del voto popular, a pesar
de las condiciones en las que no contaba con ninguna defensa ante los
desafueros de un sistema electoral que era catalogado de ineficiente y corrupto
por más del 80% de la población, se da inicio, por medios pacíficos y con una
profunda participación del Pueblo, de la más amplia e intensiva transformación
social, política y económica que haya conocido la historia de Venezuela en 170
años.
Este proceso, que mantiene el respaldo entusiasta de las más amplias
mayorías del país, y que ha logrado, de manera vertiginosa, la corrección de
las más profundas diferencias sociales, la inclusión económica y política de
millones de venezolanos y la recuperación de nuestro ser histórico y nuestra
propia noción de Patria libre y soberana, recibió, casi de inmediato y de manera
furibunda, la más intransigente oposición de las élites que habían ostentado el
poder por más de 100 años y que sin dar cuartel, instalaron un proceso brutal
de erradicación de la Revolución Chavista en Venezuela.
Estos sectores no se
detuvieron en mientes para respetar, ni la legalidad, ni la Constitución (primera
Constitución en la historia de Venezuela que es aprobada por el voto del
pueblo en 1999), ni la verdad, ni la paz. Bastará decir que para derrocar al
Presidente Chávez la derecha venezolana protagonizó un golpe de Estado en
2002 e instauró, con una saña que aún no cesa, un expediente de guerra
psicológica y mediática que ha generado afecciones en la salud mental de un
sector de la población y el intento de desprestigiar y vilipendiar a nuestro país,
a nuestra democracia, a nuestra historia, recurriendo incluso en sus estrategias
a categorías de racismo, misoginia, delitos de odio y violencia verbal y física.
Frente a la arremetida, el llamado de nuestro Comandante Chávez fue siempre
2
al diálogo con los sectores opositores; la misma madrugada del 14 de Abril de
2002 cuando fue repuesto en el poder constitucional y derrotado el Golpe de
Estado por la conjunción de la unidad cívico militar, nuestro Comandante,
empuñando un crucifijo, convocó a un diálogo y pidió el cese a la violencia.
Con el Presidente Nicolás Maduro, la actitud y el planteamiento violento de la
derecha venezolana no ha hecho sino empeorar.
Desde la misma noche de la
elección presidencial, luego de una victoria heroica, con una candidatura
opositora que apostó a la guerra sucia (aún hay paredes en Venezuela
pintadas con el lema “Que viva el Cáncer”, con lo que la dirigencia de la
derecha venezolana expresó su regocijo por la enfermedad y desaparición
física de nuestro Comandante Chávez, en un infame intento de mantener a un
sector de sus votantes exaltados por el odio y de sumir a nuestro pueblo en el
dolor y la desesperanza), que desconoció los resultados electorales y convocó
a sus seguidores a la violencia. Once venezolanos que celebraban
pacíficamente la victoria del Presidente Maduro fueron asesinados esa
madrugada.
A pesar de tamaño desafuero, a pesar de la actitud, el discurso y la práctica
violenta, a pesar de la agresión permanente que nuestro país recibió de las
administraciones de George W Bush y de Barak Hussein Obama (este último
llevó el atropello hasta el nivel delirante de considerar en una “orden ejecutiva”
a Venezuela como una “amenaza inusual y extraordinaria” para la potencia
militar más poderosa del Planeta), a pesar de que todas las prácticas de
agresión extranjera y las mentiras repetidas una y otra vez en medios de
comunicación nacionales e internacionales fueron y son alentadas y
promovidas por la dirigencia opositora venezolana, el Presidente Nicolás
Maduro ha convocado a todos los sectores de la vida nacional a mesas de
diálogo en 34 oportunidades. Lo hizo en Abril de 2013 después de que el
candidato perdedor en los comicios presidenciales llamara a la violencia, lo
hizo en Diciembre de 2013 cuando las fuerzas de la Patria obtuvimos más del
75% de las alcaldías en las elecciones regionales, el Presidente Maduro llamó
a los gobernadores y alcaldes de oposición y los convocó a trabajar juntos por
Venezuela.
La respuesta inmediata de algunos dirigentes de la derecha venezolana fue un
nuevo llamado a la violencia, destaca la crueldad con la que algunos
personeros de la oposición, como Leopoldo López, María Corina Machado,
Gabi Arellano, convocaron a “La Salida”, un llamado a incendiar el país hasta
que el Gobierno Constitucional fuera derrocado. El saldo: 43 personas
asesinadas, ciudadanos inocentes como Elvis Rafael Duran quien el 22 de
Febrero de 2014 iba camino a su casa del trabajo y fue degollado por un
alambre tensado en la vía pública, representantes de la oposición impartían en
twitter instrucciones para colocar las guayas asesinas, o como el Capitán de la
Guardia Nacional Bolivariana Ramzor Ernesto Bracho, quien el 12 de Marzo de
2014 trató de salvar a un efectivo de su tropa que se encontraba bajo fuego
cruzado y recibió una bala proveniente de una barricada en una localidad de
clase media en el Estado Carabobo.
Crímenes brutales se perpetraron, como
incendiar un establecimiento de educación preescolar con niños de entre 3 y 6
años en su interior, o la quema concienzuda de unidades de transporte público
con los pasajeros dentro.
3
En ese contexto de violencia desatada en varias regiones del país, el
Presidente Maduro convoca a los factores políticos a dialogar. Nos vimos las
caras, Gobierno y Oposición, el 11 de Abril de 2014. Algo avanzamos; por
primera vez, los responsables del golpe de estado de 2002 atendieron y
escucharon la voz de las víctimas, los tiroteados, los que quedaron parapléjicos
para siempre, los familiares de los asesinados. Se avanzó en curar heridas de
la violencia de 2014 con un gran número de personas que participaron en actos
sediciosos contra el Gobierno Constitucional puestas en libertad por una
Comisión Especial de la Fiscalía General, el defensor del pueblo y los
tribunales.
De forma intempestiva, y solo explicable por las tensiones profundas
en el interior de la dirigencia opositora, ellos deciden destituir a su Secretario
General y levantarse de la Mesa de 2014.
El 2015 la dirigencia opositora profundiza, junto a representantes de los
oligopolios locales, que son quienes en Venezuela controlan la red de
distribución de la mayoría de los bienes de consumo, alimentos,
medicamentos, manufactura, etc, desde el mismo mes de Enero 2014, un
proceso de Guerra Económica, que incluyó el ataque feroz a nuestra moneda a
través de páginas de internet y cuentas controladas por la oposición en redes
sociales, desvirtuando incluso las leyes y principios monetarios capitalistas que
la oposición dice defender, el contrabando de extracción, el acaparamiento de
los productos de la cesta básica; esto, aunado a la caída de los precios del
Petróleo, conformó graves situaciones en el desenvolvimiento normal de
nuestra economía, y junto al cerco financiero y monetario, (somos el único país
del mundo que habiendo pagado más de 63 mil millones de dólares de deuda
externa, observa como las calificadoras de deuda controladas por los centros
imperiales aumentan el riesgo país, es casi una burla notar como al día
siguiente del pago de un servicio de nuestra deuda, el riesgo país aumenta,
debemos ser pocos los países del mundo que tienen connacionales
dirigiéndose a los centros financieros a solicitar se excluya a Venezuela de
créditos a los que tiene derecho por su expediente de pago, o haciendo
reuniones con tenedores de bonos de nuestra principal industria, PDVSA, para
tratar de generar una situación de impago que agrave la crisis económica, y
que anule la capacidad de atender las necesidades de nuestro pueblo) no tenía
otro propósito que obtener beneficios políticos del intento de devastación del
país. De todas estas afirmaciones mostraremos pruebas, algunas muy duras, el
día de hoy.
Esta estrategia de Guerra no convencional contra nuestro pueblo, obtuvo
resultados circunstanciales para la oposición: lograron mayoría en la elección
parlamentaria del pasado diciembre de 2015.
Instalado el Poder Legislativo, ¿hizo la dirigencia de la derecha algún gesto de
cohabitación con los restantes poderes públicos? ¿Atendió el llamado que
hiciera el Presidente Maduro a la colaboración entre poderes y al diálogo? De
forma directa, y a través de los medios de comunicación, incluso en cadena
nacional de radio y televisión, El Presidente Nicolás Maduro convocó en 5
oportunidades a un encuentro cara a cara con el Presidente de la Asamblea
Nacional, Henry Ramos Allup.
La respuesta no solo fue la negativa por parte
del Diputado Ramos Allup, si no que se convirtió en vocero ante los medios de
4
comunicación de una especie de “recetario” para derrocar al Gobierno
Constitucional en un lapso de 6 meses. La mayoría existente en la Asamblea
Nacional desacató sentencias del máximo Tribunal Constitucional de la
República, mantuvo y exaltó el odio, la mentira, el racismo, la misoginia, los
llamados a golpes de estado. De todo esto hay suficiente documentación en
medios de comunicación y declaraciones de dirigentes de la derecha
venezolana.
Es por todas estas situaciones que saludamos la instalación de la Mesa de
Diálogo, porque lleva implícita la necesidad de RECONOCERNOS los unos a
los otros: no lograrán borrar de la faz de la tierra, por más que lo intenten, a un
movimiento social y político impulsado por el entusiasmo de millones de
venezolanos, que ha triunfado en 18 de 20 elecciones realizadas en los últimos
18 años.
No lograrán acorralar a un Gobierno que, a pesar de las dificultades,
de la Guerra Económica, del cerco financiero, de la campaña de odio, persiste
en su práctica, junto al pueblo, de atender las necesidades de quienes nunca
tuvieron nada; el día de hoy que conversamos frente a Ustedes, que
“dialogamos”, decimos con orgullo que ya hemos construido 1 millón 200 mil
viviendas de las 3 millones que construiremos antes del 2019, que ningún niño
se ha quedado sin escuela, que cada estudiante recibe su computadora
personal, sin costo alguno, para colaborar con su proceso educativo.
Decimos
con orgullo que la FAO ha denominado “Hugo Chávez” a su programa de
atención de los problemas de alimentación de los pueblos del mundo como una
forma loable de reconocer los esfuerzos del Gobierno Revolucionario para
combatir la miseria y la pobreza, estamos convencidos de que la organización
popular y el Gobierno Revolucionario derrotarán el flagelo del
desabastecimiento de alimentos y medicinas.
Nosotros los reconocemos a Ustedes como una fuerza política, hemos asumido
con hidalguía las victorias electorales y con dignidad y firmeza las derrotas. No
pedimos si no reciprocidad, o utilizando una frase que nuestro Comandante
Chávez hizo famosa: “dentro de la Constitución todo, fuera de la Constitución,
nada”.
El Presidente Nicolás Maduro ha propuesto la construcción de un amplio
consenso con todo el pueblo de Venezuela para la edificación y consolidación
de un tiempo de prosperidad económica, de felicidad social y de plena
soberanía. A ese consenso apelamos en esta mesa, a que cese la campaña de
odio, a que cese la violencia política y criminal con fines políticos, a que cese la
agresión contra nuestra economía, a que en el marco de nuestra Constitución
nos respetemos.
Insistimos en que deben ser los grandes temas, aquellos que conciernen a
nuestras mujeres y hombres, a nuestras generaciones del futuro, que aspiran
de los factores políticos que se alejen del cálculo y la retórica mezquina y
promuevan acuerdos para el bien común, los que ocupen el tiempo y el
esfuerzo en la mesa de diálogo. Consideramos posible y necesaria la
discusión franca para el respeto de los asuntos que proponemos se atiendan:
5
1. CESE AL INTERVENCIONISMO Y RESPETO A LA SOBERANÍA
NACIONAL Y AL ESTADO DE DERECHO. Asumir un apego estricto a la
acción política dentro de los postulados que establece nuestra Constitución y
las leyes de la República. Desistir de las pretensiones intervencionistas en
menoscabo de la soberanía nacional en conjunción con centros imperiales de
poder y organismos reconocidos ampliamente por su perverso expediente
colonialista e injerencista contra las Naciones independientes y soberanas.
Exigimos a la oposición venezolana respeto a los postulados históricos y a la
institucionalidad constitucional en aras del resguardo de la soberanía nacional.
2. CESE AL ODIO Y A LA VIOLENCIA SICOLÓGICA, RACIAL, POLÍTICA Y
CRIMINAL Y A LAS CAMPAÑAS DE ODIO ENTRE COMPATRIOTAS
VENEZOLANOS. Implica el compromiso de promover la paz como objetivo
inicial de esta mesa de discusión, el alejamiento definitivo de toda forma de
odio y violencia, sea esta de índole política, criminal, psicológica, racial o de
sabotaje económico, contra la República, contra las instituciones, contra las
personas y contra el bien común y privado.
Renunciar definitivamente a las acciones que han desencadenado asesinatos,
sabotaje terrorista, guerra psicológica, cartelización de medios de
comunicación nacionales e internacionales para imponer su matriz destructiva.
Cese ya a cualquier forma de violencia para obtener beneficios políticos
desestabilizadores y antidemocráticos.
3. CESE A LA GUERRA ECONÓMICA Y DEL BLOQUEO ECONÓMICO,
FINANCIERO Y COMERCIAL CONTRA VENEZUELA. Es de prioritario y vital
interés a favor de la República que la oposición venezolana cese las campañas
de desprestigio internacional contra Venezuela en los centros económicos
financieros mundiales, y desista de las acciones de boicot económico en las
redes de abastecimiento de productos esenciales a la población, así como de
los ataques a la moneda de curso legal mediante la fijación ficticia de su valor
en divisas extranjeras.
Se impone de manera inmediata la acción concertada y responsable a través
de la cooperación interinstitucional entre los Poderes Públicos que contempla la
Constitución de la República para derrotar la guerra económica, que busca
agobiar a nuestro pueblo y vulnerar el modelo de garantía de los Derechos
Humanos, el derecho al desarrollo y a la paz.
Presentaremos en esta mesa las pruebas de la acción criminal que, a lo interno
y en el exterior, se han emprendido contra nuestra economía mediante
maniobras económicas, mediáticas y financieras vulgares y absurdas.
6
4. CESE DE LAS FALSARIAS Y CAMPAÑAS DE DESPRESTIGIO CONTRA
VENEZUELA. En una estrategia articulada con centros internacionales
vinculados a poderes fácticos mediáticos y financieros, sumados a
determinadas instancias diplomáticas, la oposición venezolana ha desplegado
y ejecutado acciones que atentan contra la integridad, la independencia y la
soberanía de Venezuela, mal colocando el gentilicio, la identidad venezolana y
la integridad de nuestro país como Nación libre. Con esta campaña se pretende
abiertamente la intervención internacional de nuestro país, y se actúa en
descarado concierto con factores políticos de la derecha internacional
intolerante. La mesa de diálogo debe contribuir a la recuperación de la imagen
de Venezuela conforme a sus potencialidades reales, al fortalecimiento de sus
instituciones abiertamente atacadas desde el exterior mediante acciones y
discursos de doble estándar, a descomprimir el ahogamiento económico y
financiero del país en aras del progreso socioeconómico del pueblo
venezolano, al entendimiento entre los venezolanos desprovisto del odio y la
violencia y al resguardo de la soberanía nacional plenamente.
Publicado el 12/Nov 2016