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miércoles, 18 de diciembre de 2013

LA INTEGRACION REGIONAL Y EL ORO AZUL


Jorge  Zavaleta Alegre
Las implicaciones ambientales, políticas, culturales y estratégicas de la Cuenca Amazónica  ocupan  mayor interés en América  Latina ante  el creciente interés en  proyectos de inversión extranjera.

Los recursos energéticos y la integración suramericana. El problema de las drogas y de la minería. El desarrollo turístico, agrícola e inclusión social. Y la interculturalidad de  los pueblos originarios son desafíos y oportunidades en la Amazonía. La  tesis del oro es relevante.  En la Amazonia se encuentra el metal del oro, el oro  verde o biodiversidad,  el oro negro que es el petróleo;  y el oro azul que son las aguas de nuestro continente.

Respecto al oro azul hay referentes valiosos: Se necesita un mínimo de 20 a 40 litros de agua por día por persona para consumo e higiene básicos. Sin embargo, los recursos de agua dulce del mundo enfrentan grandes demandas por el crecimiento de la población, la actividad económica.  Crecen los conflictos acerca de los derechos de acceso, a pesar de que mucha gente todavía no tiene goza equitativamente del agua y saneamiento.

La gestión integral de los recursos hídricos tiene lugar en un marco holístico, que trata toda el agua espacial, los intereses sociales, los grupos de interés,  los niveles administrativo,  las disciplinas relevantes, posibilidad de ser sostenible, en el sentido  medioambiental, político, social, cultural, económico, financiero y legal.

La representación diplomática de Venezuela en Lima, semanas atrás convocó a un encuentro académico   con  participación de voceros del Ministerio  del Ambiente, Parlamento Amazónico,  Programa de Biodiversidad  del Instituto de Investigación de la Amazonía IIAP y del Instituto  de Trasferencias de Tecnologías  Andrés Bello – ITACAB, entre otras instituciones.

La realidad  obliga  a  profundizar  el rol del Estado en la Amazonia: ¿Es antagónico el tema del Desarrollo y la Amazonía o son complementarios?  ¿Los enfoques deben  ser nacionales, colectivos o como biomasa? ¿Los saberes, culturales, deben difundirse con mayor propiedad?. ¿Cómo desarrollar mejor  la educación?.

Una motivadora reflexión.  Si  la OPEP tiene un gran peso específico en el mundo, girando alrededor de un solo recurso natural, ¿qué sería de Sudamérica  si se  logra  los mismos alcances de la OPEP involucrando  a todos los recursos de la Amazonia¡?: América Latina  obtendría  una gran fuerza negociadora.

El IIAP está presente en casi toda la Amazonía peruana con infraestructura para investigar  producción y  capacitación en  casi  todas las comunidades indígenas. Es la secretaría técnica  para el  Tratado de la Cuenca Amazónica – OTCA en el Perú. Asesora a  las 72 Universidades  - UNAMAS, en  ocho países  de la Amazonía  Continental.

El Plan Nacional por la Infancia y Adolescencia  PNAIA 2021,  que opera con un comité multisectorial presidido por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables –MIMP, en  la Amazonía  participa la Marina de Guerra mediante  plataformas de acción social. Ecuador y  Colombia  muestran interés en este proyecto.

En este proyecto, el IIAP  plantea la necesidad  analizar la calidad de agua con los expertos  de la Marina, en   eco sondeos y aforos de agua. Así, los resultados serán  mucho más integrados y crearán espacios de trabajo  con las comunidades y especialistas. 

El 22 de marzo,  Día Mundial del Agua, el IIAP,  dio a conocer  su nuevo Sistema de Información del Agua y las Cuencas de la Amazonía Peruana “SIAGUA AMAZONÍA”, vinculando con la Autoridad Nacional del Agua (ANA), Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (SENAMHI), Instituto de Investigación para el Desarrollo (IRD) de Francia y el Instituto de Promoción para la Gestión del Agua (IPROGA).

Para la ANA el trabajo intersectorial y comunal  posibilita que el agua que llega entre diciembre y marzo no siga perdiéndose. Al tener agua regulada, las actividades productivas mejorarán y se garantizará el consumo humano.  

En Espinar se anuncia un reclamo  a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para pedir la anulación de la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que dio luz verde al proyecto arequipeño Majes Siguas II. También se cuestionará que se haya validado el estudio de Balance Hídrico hecho por la Organización de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops) en la cuenca del río Apurímac. Ninguna instancia del Estado ha expresado claramente cómo se garantizará el agua para la provincia de Espinar.

Empresarios  agroindustriales de Ica agotan el agua subterránea y ahora propician irrigaciones con aval del Estado  para irrigar desiertos costeros. Pagan salarios obviando la ley laboral en un país que sufre de stress hídrico y de desnutrición crónica. La entidad que representa a la Iglesia Católica en provincias altas, muestra su profunda preocupación por la situación de presión que nos refieren dirigentes de Espinar.

El Gobierno Regional de Ica propone la incorporación de este departamento a la Mancomunidad Regional de los Andes (Ayacucho, Apurímac y Huancavelica) para trabajar juntos en la ejecución de una serie de proyectos de infraestructura vial, desarrollo de temas turísticos, hídricos y en la generación de energía. Una propuesta concreta es trasvasar el río Pampas hacia la costa, a través de la región Ica, con la posibilidad de construir centrales hidroeléctricas e irrigar más de 150,000 hectáreas de cultivos en Ica.

Los diversos mega proyectos de desarrollo vial, hidroeléctrico y de trasvase de aguas, por ejemplo,  de la cuencas del Marañón y Huallaga pueden tener un impacto en el frágil ecosistema amazónico, y afectar consecuentemente el modo de vida de las poblaciones locales, asegura el IIAP.

En consecuencia amerita la evaluación de los impactos posibles de las alteraciones del equilibrio ecológico en la Amazonía peruana asociados con este tipo de proyectos, así como los impactos  en la economía y modo de vida de las poblaciones amazónicas.

El Oro Azul comienza a formar parte de la agenda de integración sudamericana. Mientras la Cuenca Amazónica cuenta con una relativa abundancia de agua, en los Andes y la costa del Pacífico, hay escasez declarada.