Jorge Zavaleta Alegre. Cambio16, Madrid.-
La comunicación global arroja buenos frutos. La producción literaria ha dejado
de ser patrimonio de élites o de la prensa local y exclusiva para el aldeano vanidoso.
Elga Reátegui, se fue del Perú
a España en busca de espacios para
desarrollar sus capacidades de poeta, escritora y periodista. No es fácil el
camino, pero si es una experiencia grata si recordamos a Kafka cuando recrea
Oklahoma, el valle de
oportunidades para todos, empezando para creadores y amantes de la cultura.
De Ternura y
Sexo, la segunda novela de Elga después de – El santo cura - y varios poemarios como En mi piel,
recuerda a Dostoiewski, el
maestro del género, la trama que atrapa al lector, entre otras cualidades.
De Ternura y
Sexo, es una reflexión crítica a la televisión que recurre al sexo - un acto
natural de la especie humana, que ya Kamasutra ilustra con imágines, aunque los
autores posiblemente nunca las practicaron -, para pervertir los valores sociales, desarticular a las
familias y crear crisis morales. Su
libro, en más de 600 pp atrapa al lector, porque aborda dramas y
alegrías de las familias disfuncionales,
en el más estricto sentido de la
psiquiatría y de profesionales multidisciplinarios.
Para Elga Reátegui, el mundo es ancho
y ajeno, aunque desde su atractivo blog,
convoca a personajes del ámbito cultural, con una amplitud inusual, que la
convierten en valiosa comunicadora latinoamericana.
La lectura De Ternura y Sexo provoca
vigilia, excitación, taquicardia,
enrojecimiento e insomnio. Otro ángulo es
la visión sobre el rol social de la familia. La crisis del planeta muestra dramáticas facetas de la familia destruida por
la ausencia del Estado, creyendo que solo el libre mercado es la panacea para
la vida. De este mensaje no se excluyen las grandes empresas de la comunicación y su efecto en la
convivencia humana.
La reciente obra de Elga es una
reflexión sobre el rol de los Estados y
gobernantes a emprender políticas públicas
para orientar y aplicar planes nacionales que aseguren la estabilidad de las
familias, incidiendo de manera orgánica en las personas adultas, porque el
modelo del emprendimiento empresarial en América Latina, especialmente en el mundo
rural o del migrante, es aún una utopía que el libre mercado no
encuentra respuestas saludables. Es una responsabilidad social del Estado hacer
realidad el júbilo de los jubilados.
En su blog, son convocados siempre destacados escritores y artistas, y Elga ya ha sido incorporada, con merecido reconocimiento, al mundo de las letras:
https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=5821748725125569906#editor/target=post;postID=8449567236607077627
De ternura y sexo es una novela que hay que leerla con cuidado, pues cuenta la historia Mábela, una
mujer de treinta tantos años que busca desesperadamente en sus
relaciones -sea heterosexuales o lésbicas- algo de ternura, pero
teniendo como medio los encuentros sexuales con extraños. No conoce otro
medio de obtener una recompensa afectiva más humana que aventurarse a compartir el lecho con alguien, pese a que la mayoría de veces
lo único que consigue es poseer y que la posean pero sin obtener ni una
pizca de ternura antes, después o durante del acto amatorio. https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=5821748725125569906#editor/target=post;postID=8449567236607077627
La
novela también es la historia una mujer que tiene que salir adelante
recomponiendo su salud mental-emocional y reaprendiendo a tratar con el
sexo opuesto, luego de haber sido abusada sexualmente de niña por su
tío, quien pese a que no llegó a consumar la violación, la sometió a largos períodos de tocamientos indebidos.