Jorge Zavaleta Alegre Periodista –Cambio16,
Madrid
http://www.elmercuriodigital.net/2012/01/peru-no-hay-democracia-sin.htm
http://www.elmercuriodigital.net/2012/01/peru-no-hay-democracia-sin.htm
Un debate que plantea la crisis
global. Los profesionales vinculados con
la necesidad de promover una institución rectora para “quitarle empirismo el
Estado”, en palabras de Jorge Basadre, han decidido refundar la Sociedad
Nacional de Planificación para el Desarrollo. La fecha simbólica será
el próximo 19 de octubre, al cumplirse
50 años de creación del Sistema
Nacional de Planificación.
“La estabilización macroeconómica
no debe ser conceptualizada como un fin en sí
mismo. La única forma de lograr el crecimiento con equidad es crear un
entorno macro económico sólido y estable, en el cual los recursos sean asignados
eficientemente y donde el Estado pueda conseguir recursos suficientes para
redistribuirlos en favor de los miembros más pobres de la sociedad”, sostuvo en
Lima, a principios de los 90, Jeffrey Sachs, y
este 2012 reactiva la
planificación para el desarrollo en su condición de aspirante a la presidencia
del FMI.
El doctor Otoniel Velasco,
egresado de la Escuela de Gobierno de la Universidad de Harvard, junto con
otros versados en el tema, consideran que la crisis global implica la
reactivación de la Planificación como herramienta para el desarrollo, e impulsar una Reforma del Estado que logre
eficiencia en el gasto público, el desarrollo con descentralización y equidad
social.
El INP fue desactivado en
1991 por el fujimorismo. La actual
propuesta no pasa por un Ministerio de Planificación, sino que CEPLAN, creado por Ley 28552, del 23 de mayo
del 2005, en la práctica sus
decisiones no son vinculantes con las acciones de los ministerios y por lo tanto
no participa en la gestación del
presupuesto. Un ejemplo clarifica el concepto: en la anunciada meta del actual gobierno de acabar con la desnutrición infantil, el
MEF, cuya función fundamental es cuidar el déficit fiscal, no puede ser al mismo tiempo el rígido regulador de una política social.
El renacimiento del gremio de Planificadores para el Desarrollo es una idea de quienes estuvieron muy cerca del
nacimiento del INP, en 1972.
Actualmente, son quince miembros, y otros quince superviven en la memoria
colectiva por su acción, alentando la idea de
darle al Estado un rendimiento mayor, de modo que se libre de las taras burocráticas, de la lentitud en
el expediente. Empresarios de éxito bien pueden liderar la nueva Sociedad para el Desarrollo y
rodearse de expertos jóvenes que creen y valoran del rol de esta herramienta.
La planificación nació con la
“Alianza para el Progreso”, creada por J.F. Kennedy, en respuesta a la revolución cubana. Dicha carta suscrita por el ministro Pedro
Beltrán recomendaba la modernización de la industria, reforma
agraria y otras medidas que serían prerrequisito para que los países de la
región recibieran ayuda económica de EU. Pero a esa primigenia Oficina Central
de Estudios y Programas, con presencia
del Banco Central de Reserva, no
le asignaron financiamiento alguno.
Fue el presidente de la Junta Militar, general Pérez Godoy, quien
solicitó a la CEPAL la preparación de la Ley Orgánica de Planificación - DL
14220, que da nacimiento en 1962 al Sistema Nacional de Planificación
debidamente articulado con el Presupuesto por Programas (DL 14270), antecedente
del actual Presupuesto por Resultados. El primer gobierno de Belaúnde tuvo intervenciones de trascendencia: abolió
los estancos, expropió la Caja de Depósitos y Consignaciones, creó el
Banco de la Nación, la declaración
jurada de impuestos, la reorganización del sistema tributario, la creación del
impuesto a la renta y un considerable aumento del gasto público en la educación. Y con el régimen de Velasco 1968-75, se dio
impulso a las empresas púbicas y a la consolidación de la planificación
del Estado.
El CEPLAN en su actuación revela
que tiene el encargo de trabajar un plan
para el Bicentenario de la Republica, restando énfasis al período
2012-2016. Existen avances: el “SIAF”, siglas
que la administración pública
identifica como el quipu contemporáneo o
“SIGA” Sistema de gestión administrativa. En suma, el desarrollo con
inclusión social, demanda mayor concertación y de presupuestos territoriales, superando al actual enfoque
sectorial. Cambiar de raíces la
contabilidad del debe y el haber.