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sábado, 16 de octubre de 2010

LA CAF: NO BASTA EL ENTUSIASMO PARA SALIR DE CRISIS

http://elmercuriodigital.es/content/view/30489/1/
Futuro de América Latina. No basta el entusiasmo

Escrito por Jorge Zavaleta Alegre
12-10-2010
NOTA DEL EDITOR: En el siguiente link:  entrevista al ex presidente del BID, Enrique Iglesias: http://www.diariolaprimeraperu.com/online/entrevista/hace-falta-un-estado-vigilante_72270.html
Desde EEUU hasta Europa de los 27 pasando por Asia, las proyecciones económicas oficiales son ponderadas, sin ocultar la complejidad y posibles soluciones a la crisis que invade al planeta. La propia Región Latinoamericana se ve confundida ante la demagogia del Banco Interamericano de Desarrollo - BID, que disfraza la crisis regional ante el G20, y el realismo de la Corporación Andina de Desarrollo -CAF, que habla con claridad del abandono y la pobreza extrema de grandes poblaciones rurales en los desiertos, la Amazonía y los andes.
Sin embargo, América Latina, especialmente Colombia y Perú, para citar dos ejemplos, después de dos décadas de cegado liberalismo y la casi desactivación de las instituciones fiscalizadoras del Estado, suele presentarse con discursos plenos de entusiasmo, como si no fuera una parte de este universo cada vez más interdependiente.
Frente a esta errada política externa, la Corporación Andina de Fomento – CAF (a diferencia del BID “tomado” hasta ahora por los colombianos durante la administración de George Bush) mantiene una mirada más comprometida con la Región, y por ello goza de más confianza entre sus países miembros, “goza de la flexibilidad necesaria para adaptarse a los cambios generados en el entorno latinoamericano y mundial y enrumba su gestión interna con el crecimiento de sus negocios”
La CAF señala que América Latina tiene la peor distribución de ingresos del mundo, a pesar de que ha disminuido la pobreza y ha aumentado el acceso a los servicios de educación y salud, según su reporte del 2007-2008, diagnóstico más elocuente y real que el reciente discurso, pomposo y triunfalista, del actual Presidente del BID en la cita del G20.
En su informe del 2009-2010, la CAF reitera que en la Región conviven áreas escasamente pobladas y con una participación muy pequeña en la riqueza total y con regiones donde se producen valores superiores al 40% de los bienes y servicios de toda la economía, y que se concentra entre un tercio y la mitad de los habitantes del país.
Solo tres referencias: La provincia de Buenos Aires en Argentina con 43% del PIB nacional y 41% de la población. La Región Metropolitana de Santiago en Chile con el 46% y 41% del PIB y población. En Perú, Lima tiene participaciones del 50% en la producción de bienes y servicios, y 30% en el total de habitantes.
Además, señala que “las limitadas oportunidades de movilidad social en América Latina se reflejan en avances insuficientes en un conjunto de indicadores sociales. Si bien la pobreza se ha reducido en casi todos los países y se cuenta, actualmente, con un mayor acceso a servicios básicos –como educación y salud-, la Región mantiene la peor distribución de ingresos del mundo”.
Persisten altas tasas de desempleo y subempleo, y prevalecen grandes sectores informales, incluso en aquellos que han logrado sostener importantes recuperaciones en su actividad económica. Los salarios reales de los latinoamericanos se ubican por debajo de los niveles registrados décadas atrás.
Una de las consecuencias de estas deficiencias se explica en desactivación del Estado y la correspondiente corrupción. La deficiente administración de los escasos recursos locales ha dado lugar a la superposición de programas, dispersión de recursos o la duplicación de estructuras.
Este análisis coincide con los de otros prestigiados centros académicos de Sudamérica que recomiendan privilegiar las políticas públicas que procuren aumentar el capital humano y así romper el ciclo de reproducción intergeneracional de la pobreza, para generar empleos de calidad, garantizar acceso a los servicios básicos, facilitar la acumulación de activos físicos, y procurar una mayor cobertura de pensiones en la vejez.
La conclusión es que en algunas economías (Colombia, Brasil y Chile) existirían evidencias de que se ha dado un proceso moderado de convergencia, mientras que otros (Argentina, Bolivia y Perú) esa evidencia es más difícil de encontrarla.
Los intentos de descentralización arrojan experiencias fúnebres: En el estado de Alagoas en el noreste de Brasil, casi un tercio de la población (30,4%) es analfabeta, según el censo de 2005, mientras que solo el 5% lo es en el sur del país, en el estado de Santa Catarina. En Maranhao la tasa de mortalidad infantil (85 por cada 1.000) es cuatro veces superior comparada con Sao Paulo (20 por cada 1.000).
En Bolivia, la esperanza de vida en Potosí es casi diez años menor que en los estados de Santa Cruz o Tarija. Este tipo de disparidades se manifiestan igualmente en el Perú, cuando se compara Lima con poblaciones amazónicas y de la serranía del norte y sur.
“Todo lo anterior ha confluido en una creciente frustración de la mayoría de los latinoamericanos por la lenta mejora en su calidad de vida y la percepción de muy escasas oportunidades de ascenso social”, advirtió la CAF a través de su representante en el Perú, Eleonora Silva, entidad que auspició el XIV Simposio “El Perú en escenario mundial: hacia la segunda década del Siglo XXI”, organizado por el Centro Peruano de Estudios Internacionales – CEPEI y la Universidad del Pacífico, con la participación principal de Enrique V. Iglesias, Secretario General de la Conferencia Iberoamericana, organización que agrupa a los gobiernos de Andorra, Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, Uruguay y Venezuela.
Enrique Iglesias, que también fue directivo de la CEPAL, y presidente del BID hasta fines del 90, declaró a este cronista que el capitalismo en este último siglo ha violentado todas las éticas del sistema, desde Adam Smith, padre de la economía política y la riqueza de las naciones; y que ninguna de las multilaterales ha sido capaz de emitir mensaje alguno de previsión sobre la crisis que azota a la economía mundial”.
http://www.diariolaprimeraperu.com/online/entrevista/hace-falta-un-estado-vigilante_72270.html

ENTREVISTA:ENRIQUE IGLESIAS POR UN ESTADO MAS VIGILANTE

Por: JORGE ZAVALETA ALEGRE
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http://elmercuriodigital.es/content/view/30489/1/
Financieras multilarales no anunciaron la crisis
Para Enrique Iglesias, los fundamentalismos (neoliberales) de los 90 han terminado.  La crisis, según el entrevistado, fue enfrentada adecuadamente y dejó grandes enseñanzas, aunque las multilaterales no tuvieron mensajes previsiores. La educación es la prioridad, la inversión decisiva.
Desde EEUU hasta Europa de los 27, pasando por Asia, las proyecciones económicas oficiales son ponderadas, sin ocultar la complejidad y las posibles soluciones a la crisis que invade al planeta.
La Corporación Andina de Fomento señala que América latina tiene la peor distribución de ingresos del mundo, a pesar de que ha disminuido la pobreza y ha aumentado el acceso a los servicios de Educación y salud. En su informe 2009-2010, reitera que en la Región conviven áreas escasamente pobladas y con una participación muy pequeña en la riqueza total. Solo tres referencias: Buenos Aires en Argentina con 43% del PIB nacional y 41% de la población. Santiago en Chile 46% y 41%. En Perú, Lima 50% en la producción de bienes y servicios, y 30% en el total de habitantes.
Enrique V. Iglesias, quien vivió en Washington durante cuarenta años, y mantuvo estrecha vinculación con América latina, revela que la reciente crisis llegó por falta de control de los riesgos asumidos, y también por la codicia y la especulación, evidencias que dejan muy mal parado al capitalismo de este siglo, empezando con la quiebra de las éticas desde la partida de Adam Smith a la cabeza.
 Iglesias, secretario general de la Conferencia Iberoamericana con sede en Madrid, fue el expositor principal del reciente XIV Simposio “El Perú en escenario mundial: hacia la segunda década del Siglo XXI”, organizado por el Centro Peruano de Estudios Internacionales (CEPEI) y la Universidad del Pacífico, con auspicio de la CAF.
El representante iberoamericano sostuvo que “el fundamentalismo que imperó en los años 90 se terminó. La gente es consciente que debe tener el mercado y tener un Estado: lo mejor del mercado y un mejor Estado, vigilante junto a la mano invisible del mercado que supervise ese juego y ciertamente las políticas de compensación de los desamparados”.
Se ha llegado al momento en no se sabe cómo sacar las castañas del fuego y recurrir al Estado. Ahora que resido en Europa, veo la crisis de manera diferente, y eso queda para la reflexión de los futuros análisis”, expresa quien fue destacado canciller de Uruguay, directivo de la CEPAL y presidente del BID. Enrique Iglesias estuvo muy cerca de América latina en las décadas del 60, 70, 80 y 90, épocas diferentes a la actual y cuando las negociaciones con los países eran más difíciles. “Lo cierto es que esta crisis llegó como burbujas a las bolsas, a las materias primas y sobre todo a las viviendas. Se trata de una crisis muy profunda, quizá en algunos aspectos más que la de los años 30 con 30 millones de desocupados más, y con más de 20 a 30 trillones de dólares perdidos, según la OIT y el FMI. Es una realidad que cuestiona profundamente el paradigma de un mundo vigente de los últimos 20 a 30 años.
-¿Cuál es el futuro de la Región?
-Creo que todos los temas que involucran la capacidad en América latina y su proyección al futuro están dependiendo de muchas cosas. Es muy importante avanzar en una Reforma del Estado.
-¿Qué Estado necesitamos para insertar a América latina?
-En este mundo inestable y de incertidumbre creciente, tenemos, internamente, que emprender las reformas para modernizar el Estado y ponerlo al servicio de los grandes objetivos y sociales. Es el tema central.
-¿Y qué Estado imagina usted con su larga experiencia?
-Primero, cabe precisar que la Reforma del Estado es un hecho político, no meramente tecnocrático. Implica llegar a consensos políticos dentro de los países y yo diría que el eje central de esa Reforma es el servicio civil. Un Estado con un Servicio Civil que siga las reglas de la meritocracia, bien remunerado, que constituya un punto muy importante para la ciudadanía con respecto a su futuro económico y social. La gran Reforma del Estado significa un Servicio civil eficiente, que enfrente a las grandes reformas que tenemos por delante.
-¿Y la trascendencia de la Educación?
-Es el tema central en todo este proceso de reformas. Venimos de un importante Congreso Iberoamericano de Educación en Buenos Aires y considero que existe conciencia, como nunca, sobre la Educación como la base de cualquier proyecto social de América latina. Los países del tercer mundo dependen de una Educación de calidad.
-¿Qué hacer con la corrupción?
-Es un tema delicado, que no es solo problema de los países subdesarrollados sino que va relativizándose, fundamentalmente con la democracia, sistema que tiene instrumentos para abordar la dimensión de la corrupción, mediante el cimiento de la Justicia, el mantenimiento de la prensa para que esta llegue a la conciencia crítica. Y alrededor de esto, hay que construir una política activa, sobre todo, dar el ejemplo desde arriba. Realmente los Estados eficientes y responsables son los mejores ejemplos para la sociedad.
Imprevisibilidad
Lo que más se cuestiona de la presente crisis es la imprevisibilidad, reiteró Iglesias al concurrido auditorio. “Uno se pregunta sobre las visiones apocalípticas que circularon antes, pero ni la academia ni los organismos internacionales anticiparon la magnitud de la crisis”
-¿Por qué fallaron los fenómenos económicos, los modelos de riesgo?
-En el fondo todo eso queda como un cuestionamiento al paradigma más convencional y también a los problemas que ocurren hoy que, como dice el Evangelio, en el principio era el Verbo, aquí el principio eran las finanzas y las crisis siempre se proyectan por el mundo financiero.
Estima que la crisis se explica por los riesgos desmesurados y que estuvieron amparados por una filosofía que la viví de cerca en Washington y en el BID, cuando hay que sacar las castañas del fuego y recurrir al Estado.
Todo eso queda para la reflexión y ciertamente serán parte en los espacios de los futuros análisis. Pero lo cierto, agrega, es que esa crisis llegó como burbujas a las bolsas, a las materias primas y sobre todo a las burbujas de la vivienda, y de alguna forma dejamos atrás un período muy negro de la historia del mundo.
Lo que se rescata es la reacción del mundo, fundamentalmente la acción de los gobiernos, de las tesorerías, de los bancos centrales y regionales, invirtiendo donde deberían invertir, los bancos con puertas abiertas al crédito y un cambio muy importante en los organismos internacionales. Esta crisis con los fondos de los años 90 hubiera sido otra cosa.
Veo que ha habido reacciones de bolsa, también de las inversiones, un cambio en los consumidores y hay indicios de un proceso de recuperación, pero una economía con un crecimiento muy modesto en el 2010 e inclusive el 2011.
Peligrosa dualidad
Le preocupa la diferencia de enfoque de los países desarrollados. Mientras que en Europa está naciendo el interés de la consolidación, en EEUU se trata de mantener los subsidios. Esa dualidad es peligrosa, porque nunca fue así en el pasado.
“Que el mundo tenga esas dos visiones nos debe llamar la atención, porque es el mundo desarrollado el que está involucrado. Los sectores que podrían aceptar por una salida sólida no están presentes y persiste la desconfianza del consumidor norteamericano y europeo, y que lo digan los chinos.”
“En esta coyuntura los inversionistas se ven obligados a recomponer sus balances. El sistema financiero tiene que volver a establecer niveles entre su capital y la cantidad de crédito. Hace falta la savia, que significa el crédito, para alimentar el crecimiento de la economía. Pareciera que la crisis tiene posibilidades de desaparecer, pero todavía se habla de la profundización de la recesión y la eventualidad de una deflación.”
Para Iglesias, lo más grave es que el crecimiento va a ser muy moderado. Siempre va a ser limitante para resolver 30 millones de desempleados. Subieron 400 mil desempleados. Es un hecho muy importante que los 118 millones de parados, que refieren el FMI y BM, en la década del 30 fue la época de la gran desocupación y que llevó a una guerra. Debemos ser conscientes que hoy es mayor la capacidad de respuesta y reacción de los gobiernos.
Los cambios que se vienen
Para Enrique Iglesias, el futuro va implicar 3 grandes cambios: Una relación internacional. Una nueva economía. Una nueva sociedad.
El primer cambio, según Iglesias, es el tránsito del mundo bipolar al mundo multipolar, cuyo ingreso de los países emergentes hace pensar que estos han adquirido conciencia en su poder económico, y tiene que tomarse muy en cuenta de manera informal y consciente.
Recordó la referencia del canciller peruano, José Antonio García Belaunde, que en las próximas décadas se va a producir la transferencia de poder más grande de la historia de la humanidad, que es el pasaje de un mundo occidental al mundo oriental.
Sin embargo, otros investigadores del CEPEI, como Hugo Palma (Presidente), Bruno Seminario, Carlos Amat de León y Fernando González Vigil, sostienen que el liderazgo chino podría darse dentro de los próximos 30 ó 40 años, porque el PBI de EEUU y Europa representa hoy el 55 % del total mundial y China el 8%.
Iglesias, considera que ”no sabemos todavía cómo se va a administrar la crisis. Hay visiones distintas. No es lo mismo trasladar el poder de Inglaterra a los EEUU, como se hizo al principio de la anterior crisis. Esta gran transferencia del poder económico mundial va a tener repercusiones en el poder político mundial, en el poder militar. No creo que se trate de salirse de la esfera del gran mercado. No”
El segundo cambio es la creciente relevancia de los fenómenos globales. “Siempre los ha habido, pero nunca tan fuerte con los temas del cLima, el terrorismo, las grandes migraciones internacionales, las enfermedades. Hay cosas que nos afecta a todos y se extiende de una manera vertiginosa y le dan al mundo una impronta muy especial”
Debilidad de las multilaterales
Existe preocupación por cuestionar los temas multilaterales, cuyas grandes debilidades van a continuar. Vamos a nueva economía: con trascendencia del conocimiento, técnicas de la información, con el gran privilegio de la comunicación en todos los terrenos. La lucha por la integración creadora es realmente un gran desafío, con un mundo más competitivo, quizá de lo que nunca hemos tenido.
La nueva sociedad, como tercer gran cambio, está marcada, de hecho, por el avance la clase media, con nuevas demandas: Educación, participación, democracia destinada a enfrentar nuevos valores del consumismo. “Somos la sociedad del shopping center, que nos transforma la vida, los gustos, las aspiraciones, las angustias, que empieza por los niños y termina con los mayores. Creo que la nueva sociedad va a enfrentar nuevas situaciones políticas de democracia y movimientos importantes por esos motivos”, concluye.
Jorge Zavaleta Alegre
La Primera de Lima 16-10-2010